Los especialistas señalan que la Navidad es un momento especial para disfrutar de la situación festiva que a todos nos apetece. Pero eso no significa que podamos descuidar las recomendaciones médicas que es preciso seguir durante todo el año. Es importante señalar que, si tienes algún problema de salud concreto, ...
Los especialistas señalan que la Navidad es un momento especial para disfrutar de la situación festiva que a todos nos apetece. Pero eso no significa que podamos descuidar las recomendaciones médicas que es preciso seguir durante todo el año. Es importante señalar que, si tienes algún problema de salud concreto, debes consultar a tu médico.
Entre las recomendaciones generales para mantener tu salud destacarían:
1-Continuar tu dieta si eres celíaco. No modifiques las pautas y continúa con tu alimentación específica sin cometer excesos que puedan perjudicarte porque tu organismo no tolera el gluten. Encontrarás en diferentes puntos de venta todo tipo de sustitutos que te permitirán disfrutar sin afectar a tu salud.
2-Controlar tus niveles de glucosa. Es fundamental seguir las pautas que tu médico te haya indicado. Las personas diabéticas deben controlarlos especialmente porque las variaciones que se generan en esta época del año podrían provocar problemas asociados a los picos de glucosa que se producen en el organismo. Puedes medirla en tu propia casa (usando un aparato de análisis específico) o en la farmacia (si te resulta más conveniente o no te gusta pincharte). Si eres diabético no debes abusar de los productos especiales para diabéticos porque no forman parte de tu dieta habitual.
3-Descansar adecuadamente. Dormir de manera placentera y mantener, siempre que sea posible, un horario.
4-Limitar el consumo de alcohol. Si vas a conducir y percibes que te ha sentado mal, espera a que te pase la sensación antes de coger el coche, porque es peligroso conducir en ese estado. Nunca sobrepases las tasas de alcoholemia permitidas porque, además de las multas, estás poniendo en juego tu vida y la de los demás.
5-Mantener tu tratamiento farmacológico. Debes conocer y evitar las interacciones de los principios activos con lo que vayas a consumir. No puedes renunciar a su administración porque ha sido pautada por tu médico para tratar la patología que padeces. Por ejemplo, el alcohol no es compatible con los ansiolíticos o los antidepresivos, por lo que no debes mezclarlos (ni dejar de tomarlos para poder beber). Consulta con tu médico o tu farmacéutico.
6-Medir la presión arterial. No es posible renunciar a hacerlo porque es vital para tu salud. Elige el horario adecuado y acude a la farmacia o mídela en casa con un tensiómetro digital.
7-Practicar ejercicio y evitar el sedentarismo. El ejercicio favorece la pérdida de peso y aumenta la producción de endorfinas. Muévete todo lo posible porque bajar y subir escaleras o caminar hasta tu lugar de trabajo te mantiene en forma.
8-Seguir tus pautas habituales. No puedes olvidar tomar tu medicación y cumplir las indicaciones pautadas por tu médico. Si tienes alguna duda, acude a tu médico o al servicio de urgencias si fuera necesario.