Algunas celebraciones navideñas no admiten renuncia pero no resulta adecuado realizar excesos todos los días de este período, siendo necesario controlar y equilibrar las ingestas y mantener hábitos saludables para disfrutar de un adecuado estado de salud. Entre las recomendaciones que aportan los expertos, destacarían:

1-Dieta depurativa los días en los que no hay comidas especiales. Facilita la eliminación de los excesos cometidos. Consumir vegetales, cocinar sin sal y utilizar métodos de elaboración que reduzcan las calorías (evitando los fritos, por ejemplo) es una buena idea.

2-Escoger adecuadamente los alimentos que vamos a comer en las fiestas navideñas. Lo más adecuado es optar por alimentos ricos en proteínas (como marisco, carne o pescado, por ejemplo) y verduras elaboradas de manera natural (cocidas o asadas, especialmente).

3-Evitar el consumo excesivo de dulces. No es necesario renunciar totalmente pero se recomienda comer pequeñas cantidades del que más te guste y acabar con una rodaja de piña o papaya, pues son frutas que favorecen la digestión.

4-Hidratarse es fundamental. El alcohol produce deshidratación. Es probable que tu consumo habitual sea bajo o nulo pero, en Navidad, se suele tomar alguna bebida con graduación alcohólica. Beber agua siempre es aconsejable pero, si has consumido alcohol, se convierte en una conducta necesaria.

5-Practicar ejercicio a diario. Es una actitud recomendable para mantener tu salud y tu peso en niveles adecuados. No te excuses con la falta de tiempo porque, si interiorizas la importancia del movimiento, serás capaz de encontrar tiempo para hacer una tabla en tu casa, podrás aprovechar los momentos en que has de hacer recados para evitar el coche y caminar a paso rápido o disfrutarás de un paseo por el campo o una ruta de senderismo, por ejemplo.

6-Reducir el estrés causado por la Navidad. Las técnicas de respiración resultan eficaces para controlarlo. La respiración diafragmática lenta y profunda favorece la relajación y, con ello, reduce el estrés. Cuando practicas este tipo de respiración durante unos minutos, activas la respuesta de relajación del organismo y contrarrestas los efectos del estrés. Puedes practicarla apoyando la mano derecha sobre el pecho y la izquierda sobre el abdomen para percibir el movimiento del aire en tu interior. Inspira por la nariz durante 3 o 4 segundos y dirige el aire hacia el abdomen. Aguanta la respiración dos segundos y espira lentamente por la boca durante 7 u 8 segundos. Haz una pausa de 5 segundos antes de la siguiente inhalación.

7-Remedios naturales. En Navidad se multiplican los problemas digestivos y se suele recurrir al consumo de infusiones elaboradas a base de plantas. Cada vez son más numerosas las que se consideran digestivas, laxantes o depurativas y resultan adecuadas para favorecer la digestión y reducir los excesos. A pesar de sus bondades, no pueden ser consumidas de manera incontrolada. Consulta a tu médico y sigue sus indicaciones.