La pirámide de Maslow se considera un referente en el estudio de la motivación, aunque su validez es cuestionada. Establece una teoría sobre motivación que intenta explicar lo que impulsa la conducta humana en función de las necesidades personales. Actualmente, se utiliza en diversos campos, especialmente, psicología, economía y marketing. ...
La pirámide de Maslow se considera un referente en el estudio de la motivación, aunque su validez es cuestionada. Establece una teoría sobre motivación que intenta explicar lo que impulsa la conducta humana en función de las necesidades personales. Actualmente, se utiliza en diversos campos, especialmente, psicología, economía y marketing.
Como ventajas destacaría que la pirámide es sencilla, fácil de entender y aplicar en diferentes ámbitos, comprensible, explicativa, memorizable, innovadora, aplicable a la realidad y flexible. Entre sus desventajas destacaría que es ambigua, existen otras teorías no totalmente coincidentes, demasiado optimista, discutible en el entorno científico y su secuencialidad es cuestionable (existen personas que no satisfacen sus necesidades básicas pero aspiran a cubrir escalones superiores).
Entre sus aplicaciones destacarían la vida personal (la familia suele tener un papel fundamental en nuestras vidas), la depresión (cuando las necesidades básicas y de seguridad no son satisfechas, pueden presentarse estados depresivos, aunque intervienen otras variables biopsicosociales), crecimiento personal (ascendiendo hasta la cima de la pirámide para lograr autorrealización) o a nivel educativo (los profesionales de la educación deben conocer las necesidades de los estudiantes y los estímulos que captan su interés para emplearlos correctamente).
Maslow diseñó una pirámide con 5 niveles en los que ordenó jerárquicamente lo que él consideraba necesidades de los seres humanos a lo largo de su vida. Las necesidades básicas o fisiológicas constituyen la base y sobre ellas se establecen las demás. Son biológicas (comer, dormir, respirar o mantener relaciones sexuales, por ejemplo). La necesidad más básica sería la de la supervivencia física, por lo que se considera la primera fuente de motivación de nuestro comportamiento.
En el segundo nivel se encuentran las necesidades de seguridad y protección. Incluyen los aspectos que aportan seguridad y permiten vivir sin miedo (como la salud y el trabajo).
Las necesidades sociales derivadas del sentimiento de pertenencia característico de los seres humanos están en el tercer nivel (sensación de estar integrado en la sociedad a través del desarrollo afectivo y de las relacionas interpersonales) A continuación se sitúan las necesidades de estima (confianza, respeto de los demás y respeto a uno mismo, reputación, autoestima, dignidad y logro, entre otras).
En el nivel más alto se sitúan las necesidades de autorrealización, que sólo pueden ser cubiertas cuando todas las demás se han logrado y no siempre se alcanza. Las personas en este nivel buscan su crecimiento personal y el desarrollo de su potencial para lograr éxito personal.
La conducta humana se puede alterar si estas necesidades no son correctamente satisfechas. Cuanto más bajo sea el escalón que no se puede satisfacer, mayor será su incidencia en el comportamiento. El progreso dependerá de la actitud que adoptemos para seguir avanzando con motivación y lograr la autorrealización.