Y ahí entra el método de los tres cestos, uno de los sistemas más realistas y rápidos para mujeres con vidas muy llenas. Un método visual, práctico y amable que transforma el caos en una tarea asumible. Hoy en esvivir.com te contamos cómo aplicarlo y por qué se ha convertido ...
Y ahí entra el método de los tres cestos, uno de los sistemas más realistas y rápidos para mujeres con vidas muy llenas. Un método visual, práctico y amable que transforma el caos en una tarea asumible. Hoy en esvivir.com te contamos cómo aplicarlo y por qué se ha convertido en un indispensable para tantas mujeres que buscan un hogar más ligero. La técnica es tan simple como efectiva: colocas tres cestos, cajas o bolsas y asignas a cada uno una función clara. Uno para guardar, otro para tirar y otro para mover a otra habitación. Esta división evita el bloqueo mental que aparece cuando no sabes qué hacer con cada objeto. Con los tres cestos la decisión es inmediata: eliges una categoría y sigues adelante. El método funciona porque reduce la toma de decisiones y elimina la sensación de "todo está por hacer". Convertir el orden en pequeñas acciones repetidas es mucho más fácil que enfrentarte a un gran proyecto de golpe. Pueden ser cestas bonitas, cajas que ya tengas o incluso tres bolsas resistentes. No requiere compras ni preparación previa. Basta con tenerlos a mano. Una balda, una mesa, un cajón, el recibidor o la mesita de noche. Es un método pensado para espacios concretos, no para hacer una limpieza profunda del hogar. Cuanto más pequeño el área, más rápido verás el resultado. Cada objeto va a uno de estos cestos: La clave es la rapidez. El método funciona cuando no te detienes a razonar demasiado. Primero vacía el cesto de tirar, porque libera espacio y da una sensación inmediata de avance. Porque elimina perfeccionismos, acelera decisiones y convierte la tarea de ordenar en algo ligero. No requiere planificación previa, se adapta al cansancio, reduce la ansiedad del desorden y ofrece un resultado rápido que motiva. Es ideal para esos días en los que "quieres que todo esté mejor" pero no tienes energía para más. Además, es un sistema que puedes usar incluso cuando te sientes saturada. Tener tres cestos listos hace que ordenar sea casi automático. Perfecto para controlar mochilas, correspondencia y chaquetas que se acumulan sin darte cuenta. Les ayuda a entender categorías y a participar en el orden sin discusiones eternas. Ideal para revisar productos caducados, cosmética sin uso o envases vacíos. La versión en miniatura: tres bandejas para ordenar papeles, accesorios o maquillaje. Cinco minutos antes de dormir pueden dejar la casa en modo "lista para mañana". Hazlo visualmente atractivo usando cestos bonitos, deja uno siempre accesible para pequeñas rondas de orden, revisa cada dos días y, sobre todo, evita que el cesto de tirar se acumule. Es un método flexible y sostenible si lo haces parte de tu rutina sin presiones.Qué es el método de los tres cestos y por qué funciona
Cómo aplicarlo paso a paso
1. Coloca los tres cestos en la zona que quieras ordenar
2. Empieza por un espacio pequeño
3. Decide sin pensar demasiado
• Guardar: cosas que pertenecen a ese lugar y usas a diario.
• Tirar: papeles sueltos, bolígrafos gastados, envases vacíos, objetos rotos o cosas olvidadas que ya no tienen utilidad.
• Mover: todo lo que pertenece a otra habitación: juguetes, ropa, libros, cargadores.4. Vacía los cestos en el orden correcto
Después, el de mover, llevando cada cosa a su lugar correspondiente.
Por último, el de guardar, recolocando lo que realmente debe estar en esa superficie.
En pocos minutos, la zona queda despejada y con una sensación de orden muy visible.Por qué este método funciona tan bien para mujeres con días intensos
Variantes prácticas según la zona de la casa
1. En la entrada
2. En la habitación de los niños
3. En el baño
4. En escritorios y tocadores
5. En la rutina nocturna
Cómo mantener el método con el tiempo