"Todo lo demás es humo": dejar de fumar con acompañamiento sanitario

Ángela Zorrilla

Según la Asociación Española Contra el Cáncer, el tabaco causa el 30% de las muertes por cáncer y sigue teniendo un impacto devastador en la salud. Dejar este mal hábito no siempre resulta fácil. Por eso, es importante tomar conciencia de todas las herramientas que puede ofrecer un acompañamiento médico. Los profesionales de la salud están aquí para ayudarnos. Te contamos cómo. 

22/12/2025

Dejar de fumar es mucho más que una decisión: es un regalo que una persona se hace a sí misma y a su salud. Según Ángela Crespo, directora general de Aflofarm España, "el tabaquismo es la principal causa de muerte prevenible y está relacionado con 29 enfermedades distintas, incluyendo diez ...

Dejar de fumar es mucho más que una decisión: es un regalo que una persona se hace a sí misma y a su salud. Según Ángela Crespo, directora general de Aflofarm España, "el tabaquismo es la principal causa de muerte prevenible y está relacionado con 29 enfermedades distintas, incluyendo diez tipos de cáncer. Si alguien deja de fumar antes de los 44 años, puede recuperar hasta nueve años de vida sana".

Asesoramiento, clave para asegurar el éxito del proceso

Pero abandonar el tabaco no siempre es fácil. Solo entre un 3 y un 5 % de quienes lo intentan logran mantenerse sin ayuda profesional pasados seis a doce meses. Por eso, el acompañamiento sanitario es clave: "El consejo y seguimiento integral e individualizado de un profesional puede elevar las tasas de éxito hasta un 32 %", explica Crespo.

El apoyo profesional no solo mejora las cifras: también ayuda a transformar el miedo al fracaso en motivación real. "Cualquier intervención por parte de un sanitario aumenta las probabilidades de éxito. Y cuando participan distintos profesionales de manera complementaria, el seguimiento continuo refuerza la confianza del paciente", añade la directora.

Los beneficios de dejar el tabaco aparecen rápido. En solo un par de días, la nicotina desaparece del organismo y se recuperan sentidos como el gusto y el olfato. A las tres semanas, los pulmones ya funcionan mejor y, a los tres meses, trabajan casi como antes. Tras un año sin fumar, el riesgo de sufrir un ataque al corazón se reduce a la mitad.

Pero, ¿cómo ayuda exactamente un equipo sanitario? Crespo detalla que los profesionales ofrecen protocolos que incluyen consejo, seguimiento individualizado y recursos adaptados a cada persona. Esta combinación aumenta las probabilidades de éxito y permite que cada paciente avance a su ritmo, con seguridad y apoyo constante. Para quienes aún dudan, el mensaje es claro: "El primer paso es hablar con un profesional sanitario de confianza. Su orientación y apoyo son la mejor garantía de éxito para dejar de fumar", concluye Crespo.

Con el acompañamiento adecuado, dejar el tabaco deja de ser un reto solitario: se convierte en una oportunidad real de mejorar la salud, recuperar energía y disfrutar más de la vida. Porque, como dice la campaña de Aflofarm, "todo lo demás es humo".

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