Dormir a pierna suelta
Victoria Carmona
La decoración del dormitorio no es sólo una cuestión estética: cortinas, lámparas, muebles, ropa de cama… lo más importante para un sueño reparador es escoger una cama adecuada y por supuesto un colchón y somier adaptado a nuestras necesidades y que ayuden a pasar la noche lo mejor posible.
Aquí van algunas recomendaciones para elegir lo mejor posible la cama donde dormimos, tanto el colchón, el somier, la almohada; e incluso el control de la temperatura de la habitación, los colores, los olores, sin fibras artificiales o edredones termorreguladores. Consejos para elegir la mejor cama 1. Buscar una cama ergonómica: debe ...
Aquí van algunas recomendaciones para elegir lo mejor posible la cama donde dormimos, tanto el colchón, el somier, la almohada; e incluso el control de la temperatura de la habitación, los colores, los olores, sin fibras artificiales o edredones termorreguladores.
Consejos para elegir la mejor cama
1. Buscar una cama ergonómica: debe medir 20 cm más que nosotros y tener un mínimo de 90 cm de ancho en camas individuales y 1,60 en camas dobles.
2. El colchón debe acomodarse al entorno del cuerpo, aunque con diferentes puntos de firmeza para aliviar las tensiones y mejor si es termorregulador o con sistemas antihumedad.
3. Es un error elegir el somier sin tener en cuenta el colchón. Según sea éste, así debe elegirse para mantener todas las propiedades del colchón.
4. Hay que elegir la almohada en función de la postura en la que durmamos, sin renunciar a que incorporen tratamientos antibacterias y antiácaros:
- De lado: lo mejor es elegir una cervical, ya que sujeta mejor el cuello y la nuca.
- Bocarriba: una almohada baja, ya que alivia la presión y la tensión muscular.
- Bocabajo: fina, para que no doblar el cuello.
5. Es fundamental controlar la humedad, que no supere el 70% y la temperatura del dormitorio entre 18 y 20º-
6. No hay que dejar encendidos ni la tele ni la radio, ya que emiten ondas electromagnéticas que inhiben la producción de la melatonina (hormona del sueño) y tampoco luces, porque baja el nivel de serotonina que impide llegar a las fases profundas del sueño.
Según el problema de salud que tengamos, debemos elegir un tipo u otro de colchón:
1. De espalda: viscoelástico que alivia la presión corporal
2. Vértigo: de muelles, ya que da sensación de gravidez.
3. Insomnio: con núcleo de lavanda, que calma y relaja.
4. Mala circulación: de látex para activar la circulación
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