Es muy probable que alguna vez te hayas visto en esta situación, llegar a un gimnasio por primera vez y no saber cómo desenvolverte y qué hacer. Es normal, a todo el mundo le pasa. Además, como te sientes aturdida, sientes que todos los presentes te están observando e incluso es posible que te pongas roja como un tomate.

Esta anécdota tan común recibe el nombre de gymtimidation, una sensación un poco intimidante que aparece al sentirse observada por hombres e incluso mujeres en el gimnasio. Puede que sea un poco difícil, pero con el tiempo aprenderás que ir al gimnasio forma parte de un proceso al que te adaptarás con el tiempo.

Al final, hacer tus ejercicios diarios formará parte de una rutina, donde nadie podrá desanimarte ni intimidarte. ¿Quieres tomar nota de algunos consejos para hacerlo más llevadero y llegar a ese estado cuanto antes?

Olvídate de todos los que tienes a tu alrededor

Cuando alguien nuevo llega al gimnasio, los más veteranos se dan cuenta de ello inmediatamente. Sin embargo, debes pensar que eso forma parte de la vida y no darle tanta importancia. En realidad, son muy pocos los hombres que te van a mirar de forma pecaminosa o te van a criticar. Si has entrado al gimnasio con una meta, intenta cumplirla a toda costa, concéntrate en ti y olvídate de todo lo demás.

Será difícil, pero tú puedes con ello

Lo sabemos. Es algo nuevo y los primeros días van a ser complicados. De hecho, los hombres y mujeres que están a tu alrededor están tan acostumbrados que todo parece más fácil de lo que en realidad es. No te desmoralices y haz lo que puedas. Ten en cuenta que estás aprendiendo. Al final, adquirirás tanta resistencia como aquel pesado que de vez en cuando te mira y sonríe con una sonrisa entre burlona y pecaminosa.

Busca ayuda para adquirir confianza

Si no sabes cómo utilizar los aparatos del gimnasio o no estás segura de cómo hacerlo, lo más lógico es que busques ayuda, bien en los responsables del centro o en alguna persona que tengas al lado. De esa forma no solo evitarás posibles lesiones futuras sino que al final ganarás confianza y te importará menos sentirte observada. Al final te convertirás en una veterana y no es nada malo pedir consejo al instructor sin esperar a que él se acerque a ti antes.

Evita observar a los demás

Algunas veces, las chicas del gimnasio se sienten intimidadas por otras de figuras esculturales que están habituadas a ejercitar su cuerpo cada día. Sin embargo, no todas quieren llamar la atención y concentrar las miradas ajenas. Gran parte de ellas se encuentran centradas en hacer sus ejercicios y no se sentirán bien si se sienten observadas. Ponte en su piel y no hagas precisamente lo que no quieres que te hagan a ti.

Haz lo posible por no caer en la gymtimidation. Que te miren o no carece de importancia. Lo verdaderamente importante es sentirte bien contigo misma.