Desarrollar el intelecto, buscar el conocimiento en sí mismo, generar relaciones de amistad sólidas y duraderas, o sensibilizar acerca de la importancia de coexistir con la naturaleza son algunas de los principales fundamentos sobre los que se sustenta el sistema educativo japonés Soka. Porque lo que trata de conseguir este ...
Desarrollar el intelecto, buscar el conocimiento en sí mismo, generar relaciones de amistad sólidas y duraderas, o sensibilizar acerca de la importancia de coexistir con la naturaleza son algunas de los principales fundamentos sobre los que se sustenta el sistema educativo japonés Soka. Porque lo que trata de conseguir este modelo es fomentar la felicidad de los estudiantes y que sean capaces de mantener relaciones armoniosas con su entorno. El término fue utilizado por primera vez por Tsunesaburo Makiguchi en su obra "La pedagogía del sistema de creación de valor", publicada en 1930. Con ella, el autor planteaba construir un sistema de enseñanza en el que se enfatizara la creación de valor. De ahí que sus ideas fundamentales sean, como señalábamos anteriormente, facilitar el intercambio de experiencias con el diálogo, fomentar una cultura de paz y reflexión, potenciar el aprendizaje de idiomas y la lectura, así como contribuir al bienestar de la humanidad, entre otras.
Y como la vida es un continuo aprendizaje, lo que se busca con esta metodología es la inmersión del individuo (desde pequeños), con el mundo cotidiano que le rodea, y tratar de lograr la implicación personal con el resto de individuos y con la naturaleza. En este sentido, este sistema educativo Soka va desde la infancia hasta la universidad, pues va más allá del mero estudio y la obtención de un título, sino que busca, por encima de todo, el desarrollo intelectual de la persona, aportando bienestar tanto al resto de individuos como a su comunidad.
El sentido global de búsqueda de entendimiento y acercamiento entre personas del sistema educativo Soka pone de relevancia el papel preponderante de los profesores y su desarrollo y crecimiento, personal y emocional. En el sentido de que si ellos no evolucionan en su ejercicio profesional, tampoco podrán hacerlo sus alumnos. De tal manera que se fomenta la colaboración en las aulas, la creación de redes de apoyo entre docentes, se enfatiza su papel en la comunidad, etc.
En este tipo de enseñanza, los profesores mantienen reuniones mensuales, denominadas "de aliento mutuo", en las que también participan las familias, con el objetivo de favorecer el diálogo entre profesores y familias, ya que la idea básica del papel que desempeña el docente en esta educación es que trabaja en dos escenarios: el aula y la comunidad.