El ritual de higiene y belleza comienza en el baño. Con la pandemia este se ha hecho todavía más imprescindible, puesto que de él depende en mayor o menor medida ponerle freno a la propagación de bacterias. Al igual que la cocina, el baño ha cobrado protagonismo dentro del hogar. Sin necesidad de ejecutar engorrosas obras y dejarte un dineral en el intento, puedes otorgar un aspecto moderno a tu cuarto de baño haciendo unas pequeñas intervenciones. La grifería puede ser una de ellas. El acabado negro mate marca tendencia en su versión empotrada, monomando, caño alto, caño bajo… para lavabo. De este modo, conseguirás darle un toque de elegancia y modernidad. Lo ideal es que la pieza disponga de aireador y que cuente con un sistema de apertura en frío. De ese modo, cada vez que abramos el grifo en la posición central emergerá agua fría. Aunque también existen otros tipos de grifo que se activan por contacto, es el caso de las griferías electrónicas equipadas con sensores. En el caso de la ducha o bañera se debe apostar por los termostáticos que tienen la finalidad de controlar la temperatura y el caudal del agua ahorrando en energía y en su consumo.

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En el caso del mueble de baño elige uno suspendido, ideal para estancias pequeñas porque la sensación de amplitud será mayor y te ayudará a facilitar la limpieza inferior. Hay quien lo complementa con columnas de almacenaje o estantes. También los hay que van hasta el suelo. Para contribuir a la luminosidad predominan el color blanco, beige, gris, o materiales naturales como la madera. Los lavabos sobre encimera, suspendidos, o de doble seno se encuentran entre los favoritos. Cuadrados, redondos, rectangulares, ovalados, etc., fabricados en Solid Surface que transmiten resistencia, durabilidad, y son antibacterianos, en cerámica o porcelana, en piedra, de cemento pulido y en un amplio abanico de tonalidades. En lo que respecta al inodoro prima el suspendido y la cisterna empotrada.

El espejo es otro de los imprescindibles en el cuarto de baño. En el caso de estos productos ocurre algo parecido a lo que pasaba con los lavabos podrás elegir entre un completo catálogo de formas y acabados. En el caso de una estancia de dimensiones reducidas decántate por uno grande para generar sensación de amplitud. Los redondos con marco o sin él también están de moda. Por ejemplo, si dispones de dos lavabos siempre puedes colocar doble espejo, uno encima de cada pieza. Pero sin duda los que van ganando terreno son aquellos que integran luces LED. Los hay incluso con sistema antivaho para que no tengas que preocuparte por desempeñarlo una vez que te duches.

¿Ducha o bañera? Si estás comprometida por el espacio elige la primera opción. En el mercado tendrás a tu disposición todo tipo de diseños de platos de ducha, mampara y separador para adaptarlos a tus gustos y necesidades. Si cuentas con una instalación grande apuesta por la bañera exenta con grifería de pie o por el binomio ducha y bañera. Incluso si te atreves podrás colocarla en tu dormitorio. Es una opción elegante, moderna y original.

Pintando la pared de blanco conseguirás tu doble objetivo: lucir un baño más luminoso y más grande. Tampoco puedes dejar de lado los accesorios como toalleros, el portarrollos, la escobilla, las alfombras de ducha, los vasos para los cepillos de dientes, la jabonera o dispensador de jabón, los colgadores, entre otros. Verás que con tan sólo cambiar estos pequeños elementos tu baño será otro.

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