Pop it, cómo funciona el juguete anti estrés para niños y mayores
Popularizados gracias a Tik Tok, este pasatiempo es como poder explotar burbujas de plástico sin fin
Son el juguete de moda, pero muchos desconocen que de simples juguetes no tienen anda. Por supuesto hablamos de los `pop it´, esos objetos de silicona de colores y un relieve de semiesferas que se aplastan para darles la vuelta y repetir la operación en bucle. Popularizados gracias a Tik ...
Son el juguete de moda, pero muchos desconocen que de simples juguetes no tienen anda. Por supuesto hablamos de los `pop it´, esos objetos de silicona de colores y un relieve de semiesferas que se aplastan para darles la vuelta y repetir la operación en bucle. Popularizados gracias a Tik Tok, este pasatiempo permite simular la explosión de burbujas de plástico; eso sí, con la ventaja de que lo puedes utilizar horas y horas sin que se acaben. Es, por tanto, un juego sin final tan simple como adictivo, que según los expertos puede provocar una respuesta sensorial meridiana autónoma (ASMR).
Pero además, según sus creadores, su finalidad es producir una gran estimulación sensorial. Recomendado para niños mayores de tres años, algunos especialistas los usan con niños con autismo, deficit de atención, ansiedad, hiperactividad, problemas motores, discapacidad y necesidades especiales.
Juguetes para aliviar el estrés
De hecho, los pop it se engloban dentro de los ´fidget toys´ o juguetes antiestrés (como los famosos ´fidget spinners´) y su función es para autorregular la ansiedad y ayudar a la estimulación de personas que padecen trastornos del espectro autista, trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), problemas de concentración o problemas de desarrollo de habilidades motoras, entre otros.
Además, son una manera de aliviar el estrés. Por ahora no hay investigaciones específicas sobre este objeto, pero en 1992, la doctora Kathleen M. Dillon, psicóloga del Western New England College (Estados Unidos), elaboró un estudio en el que los participantes manipularon el plástico de burbujas. Los resultados hallaron que tres de cuatro voluntarios reportaron sentirse significativamente más tranquilos, menos cansados y con más energía después de pasar rato con ese pasatiempo.
La propia Dillon explicó que otras ventajas a tener en cuenta sobre esta actividad incluyen "el no requerir ninguna habilidad especial, ningún entrenamiento o práctica para poder disfrutar de ella, y además la poca probabilidad de generar efectos de ansiedad que han demostrado presentar otras técnicas de relajación en algunos sujetos".
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