El Pickleball, al igual que el resto de deportes en los que se inspira, necesita una pala, una pelota y una red. En el caso de la pala debe ser rígida, alargada y no superar entre largo y ancho los 61 cm. Se emplea una bola fabricada en plástico y perforada, mientras que la red se coloca en el centro de la pista y presenta unas dimensiones de 6,7 metros de largo y una altura de 91,44 cm en los extremos y de 86 cm en su parte central, pudiendo elegir entre aquella fija o móvil, según indican en la página web de Pickleballtop.com. Se puede jugar de forma individual o en pareja sin existir restricciones de edad, por lo que está indicado para todo tipo de públicos.

Además, el tipo de bola cambia dependiendo de si se juega en interior o exterior. En lo que respecta a los espacios interiores la pelota presenta agujeros más grandes, mientras que al aire libre se utiliza una con orificios más pequeños. Por su parte, el campo de juego cuenta con una longitud de 13,41 m de largo y una anchura de 6,10 m. A ambos lados de la red existe una zona delimitada de no-volea de 2,13 m. Aquel equipo que logre obtener 11 puntos, con una diferencia de dos con respecto al rival, ganaría el partido. El objetivo de esta disciplina es golpear la pelota con ayuda de la pala para que pase por encima de la red y caiga en la zona del equipo contrario. En el momento de realizar el saque frontal, que debe realizarse por debajo de la cintura, el jugador debe colocarse en la zona de servicio, que se corresponde con el compartimento justo detrás de la línea de no-volea y hacia un lateral, con un pie un poco adelantado y el otro un poco retrasado. Aparte del golpear de forma frontal, el jugador puede realizar el saque con efecto, que consiste en "golpear con algo de ángulo", tal y como bien explican en el vídeo de Pickleball Espanol.

Para iniciar el ataque, colócate enfrente de la red con los pies firmes dejando un pequeño espacio entre ambos y manteniendo la raqueta arriba agarrándola con las dos manos para poder golpear del revés y del derecho. De esta forma podrás enfrentarte de forma rápida a lo que tienes delante. El Dinking consiste en golpear la pelota lo más bajo que se pueda para atravesar la red, según apunta el experto, "la malla es más alta en los extremos y más baja en el centro", por lo que se tienen más probabilidades si se ejecuta en ángulo.

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