Por lo general, los codos tienen tendencia a oscurecerse. El roce y el apoyar los codos, los cambios hormonales, la exposición al sol y los pocos cuidados que, en la mayoría de las ocasiones, les otorgamos, son las principales causas para que la piel de esa zona se reseque y ...
Por lo general, los codos tienen tendencia a oscurecerse. El roce y el apoyar los codos, los cambios hormonales, la exposición al sol y los pocos cuidados que, en la mayoría de las ocasiones, les otorgamos, son las principales causas para que la piel de esa zona se reseque y la notemos áspera al tacto. Por ello, para evitar que se acumule piel muerta es imprescindible llevar a cabo una exfoliación previa, de tal manera que, si posteriormente queremos realizarnos algún tratamiento (casero o estético), para suavizar y aclarar la piel pues resulten mucho más efectivos. Lo primero de todo es que para evitar tener unos codos resecos y ásperos lo recomendable es aplicar una crema hidratante a diario. Y si quieres mayor hidratación, nada mejor que añadirle a nuestra crema un chorrito de aceite de oliva, de almendras o de coco, para que contribuyan mucho mejor a hidratar la zona.
Porque como señalábamos anteriormente, la sequedad o la aparición de manchas oscuras en la zona de los codos no se debe a la falta de higiene, sino a aspectos relacionados con la acumulación de células muertas, las manchas que surgen con la edad, tener la zona muy reseca de manera constante, una exposición prolongada al sol o determinadas enfermedades de la piel, como el eczema.
De ahí que los expertos aconsejen seguir algunos pasos sencillos que podemos realizar para comenzar a tener menos áspera y más hidratada esa zona. ¡Vamos a verlos!
- Primero, durante el baño, no olvides lavar bien con agua y jabón tus codos, ya que, a lo largo del día, los apoyamos en diversas superficies lo que hace que acumulen la suciedad fácilmente.
- El segundo paso tiene que ver con la aplicación de la crema hidratante, si es concentrada mejor. Se aconseja realizar esta sencilla tarea después del baño y antes de acostarte, lo cual te ayudará a mantener la zona en buen estado.
- Finalmente, exfolia la piel de los codos para mejorar el estado de la piel y disimular las posibles manchas.
A continuación vamos a darte algunas claves para que luzcas unos brazos y unos codos hidratados, saludables y atractivos. ¡El verano está a la vuelta de la esquina!
1.- Ponte crema hidratante con regularidad: es conveniente aplicarse una buena crema hidratante, varias veces al día. Si realizas este sencillo consejo a diario vas a notar, enseguida, cómo tu piel mejora y tiene un aspecto más hidratado.
2.- Prepara un tratamiento casero muy hidratante, a base de aloe vera y rosa moqueta. El aceite de rosa mosqueta ayuda a cuidar la piel, prevenir la resequedad y otros problemas. Puedes mezclarlo con el de aloe vera (unas tres cucharaditas), para obtener una fórmula mucho muy rica en nutrientes.
3. Masajéate los codos con aceite de oliva, de coco o de almendras y aplícatelo sobre la zona, dando pequeños masajes durante varios minutos a diario. Verás cómo se eliminan las asperezas y codos comienzan a lucir más hidratadas y tersos.
4. Prueba la cúrcuma con aceite de oliva, ya que ayuda a inhibir la producción de melanina, responsable de las manchas oscuras y la hiperpigmentación. Esta potente combinación es ideal para eliminar las manchas oscuras de los codos.
5. El pepino, nuestro aliado. Gracias a sus propiedades hidratantes, el pepino es nuestro alidado perfecto, en este caso concreto, tanto para hidratar la zona como para despigmentar la piel. Para ello, haz un batido con un pepino cortado a rodajas y aplícalo sobre los codos, dejándolo secar. Retíralo después con agua tibia.
6. Otra opción es la cúrcuma y aloe vera. Si antes hablábamos de mezclar la cúrcuma con el aceite de oliva, ahora te proponemos añadir una cucharadita de cúrcuma a tu gel de aloe vera. Después de remover ver la mezcla, aplícala sobre los codos ásperos y deja que actúa, al menos, media hora.
7. La miel, ¡que no falte! Sus propiedades antibacterianas ayudan a equilibrar la producción sebácea y a aclarar el tono de la piel, a la vez que hidrata y revitaliza la zona dañada. Mezcla en un bol una cucharada de miel, tres de cúrcuma y otras tres de leche. Moja un algodón en la mezcla y aplícate en los codos, hasta que se seque.