Ingrediente muy interesante para todo tipo de platos, las algas nori cuentan con un sinfín de propiedades nutricionales que aportan cualidades organolépticas y nutritivas a nuestro organismo. Por ello, aunque en la variedad está el gusto y debemos incluir en nuestra dieta todo tipo de alimentos, las algas nori no ...
Ingrediente muy interesante para todo tipo de platos, las algas nori cuentan con un sinfín de propiedades nutricionales que aportan cualidades organolépticas y nutritivas a nuestro organismo. Por ello, aunque en la variedad está el gusto y debemos incluir en nuestra dieta todo tipo de alimentos, las algas nori no deben faltar en esa lista de ingredientes a consumir. Así que, vamos a hacer un repaso de sus principales beneficios y cuál es la mejor manera de consumirlas para obtener todas sus propiedades. Como decíamos anteriormente, este vegetal marino cuenta con gran cantidad de propiedades nutricionales, muy beneficiosas para la salud, y un alto contenido en nutrientes esenciales. Además de su elevada capacidad antioxidante (lo cual ayuda a retrasar el envejecimiento), gran aporte de potasio adyuvante, ideal para regular la tensión arterial, y para prevenir otro tipo de patologías, como las hepáticas, o la formación de radicales libres nocivos para la salud. Y si eres de las que hace deporte, te interesa saber que las algas nori están relacionadas con la vitamina A, con la consiguiente mejora en la recuperación, de ahí que se recomiende su consumo a deportistas que realizan entrenamientos continuos y extensos.
Junto a su excelente sabor y textura, cabe destacar que las algas nori son bajas en calorías, pero con gran cantidad de proteínas, minerales, vitaminas y fibra dietética, mientras que sus proteínas son ricas en ácido glutámico, arginina y glicina. Por otro lado, porque como verás, todo son ventajas, las algas nori también destacan por su contenido en vitamina C, lo cual ayuda a mantener la función inmune, prevenir y tratar el resfriado común y otras patologías de carácter respiratorio. Finalmente, otra de las propiedades destacables de las algas nori es que ayudan a controlar la tensión arterial, ya que presentan un alto contenido en potasio, lo que las hace muy recomendables para aquellas personas que sufren de hipertensión crónica o patologías de tipo cardiovascular. En este sentido, también ayudan a reducir el colesterol, a la vez que proporcionan un efecto antiinflamatorio, fotoprotector, antioxidante y previenen la osteoporosis.
Asimismo son las mejores aliadas para el cuidado de nuestra piel, pues sus proteínas, minerales y aminoácidos permiten hidratar la piel, mientras que para el cuerpo se utilizan para la talasoterapia, el tratamiento que incorpora baños con elementos marinos, pues ayuda a purificar y regenerar la capa más externa de la epidermis. ¿A qué esperas para incluirlas en tu dieta diaria?
Aunque las algas nori pueden prepararse de muchas maneras, la más conocida es, sin duda, es incluirlas al elaborar sushi con ellas. En este caso, debemos procurar adquirir el alga ya deshidratada, en forma de película o lámina, para que puedas envolver el arroz y el resto de los ingredientes con ella.
Otra manera de utilizar las algas nori es como base para un tartar, de tal manera que el pescado crudo que contiene, cortado y aderezado, junto con las algas, que le aportan un toque crujiente, mejoran las características de la preparación. Aunque también es posible, pero más laborioso, tostar y picar las algas nori para incluirlas en las ensaladas, como ingrediente en alguna salsa o como aderezo de algún plato. Ingeridas de esta manera se potencia el sabor y se da al plato un toque más intenso que mejorará y potenciára el sabor.