Nos ponemos en las manos de Diego y de Begoña, dos artesanos gallegos, que nos demuestran que cuando se habla de creatividad no existen fronteras. A través del origami, un método de origen japonés en el que se van realizando pliegues sobre el papel hasta obtener una figura, a diferencia de la papiroflexia, aquí no hay que cortar ni emplear pegamento. Los papeles utilizados en Joyas de papel provienen de Japón, Italia o de Reino Unido, y hasta se atreven con los envoltorios de los sugus, los billetes antiguos o los papeles que tintan en su propio taller. Así, el chiyogami está caracterizado por ser fabricado de forma artesanal, por su finura y por reflejar elementos que nos trasladan a Oriente. Los papeles italianos destacan por su calidad y exquisitez, mientras que los procedentes de Reino Unido son sobrios, de alto gramaje y acabado metalizado. Otro de los materiales presentes en sus piezas es la plata de Ley.

Estas joyas de papel, fabricadas en Nigrán (Pontevedra), son resistentes a los golpes y también al agua. Aconsejan limpiarlas con "un paño seco" después de haber estado expuestas al agua. Asimismo, es recomendable "guardarla protegida en un lugar seco y alejado de la luz intensa" para mantener intactos "su color y textura", advierten en su página web. Elaboran anillos, broches, collares y pendientes, pero han tenido la oportunidad de colaborar en otros proyectos, como el de Correos, en 2017. Ofreciendo una versión de un sello postal plegable y con forma de pajarita. Querían lanzar un guiño a una forma típica de la papiroflexia y al mismo tiempo a las "palomas mensajeras". Además, han dejado su huella en el anuncio de la Lotería Nacional, del año 2013. Los aviones de papel que salen en pantalla fueron confeccionados por ellos mismos.

Su catálogo se compone de seis colecciones: Zoé, Classic, ZoO, Áurea, Museums y Vuelta al Coles, dentro de las cuales hay diferentes colores para un mismo modelo. Con Zoé disfrutamos del aire libre mediante joyas que representan a pájaros, mariposas o flores, como los lirios o las camelias, mientras que dentro de Classic, podemos ver el símbolo de la pajarita, propio de la papiroflexia, con estampados diversos, así como hojas, grullas, loros o kimonos. En ZoO, como su nombre indica, nos invitan a adentrarnos en el reino animal con pendientes en forma de elefante, colgantes de búho o collares de caballitos de mar. Los detalles geométricos vienen de la mano de Áurea y sus pendientes circulares, collares triangulares, etc. Museums nos promete un recorrido por el mundo del arte pictórico, en el que cada pieza de la línea se corresponde con obra de un pintor reconocido (Van Gogh, Picasso, Velázquez, Magritte o Kandinsky, entre otros). Por último, en Vuelta al Cole nos sumerge en este universo mágico de la infancia, en los que los aviones de papel sobrevolaban nuestras cabezas, los barquitos de papel navegaban en la bañera o en el que los molinillos se movían gracias al impulso de nuestros soplidos. Además de las muestras expuestas en su web, existe la opción de personalizar una pieza al gusto. Pero el origami no sólo lo veremos en lo que son las figuras en sí, sino que también nos acompañará en su embalaje, con una cajita de papel plegable.

FOTO PRINCIPAL.: Pendientes Meninas. Joyas de papel.