Seguida de cerca por las celebrities de todo el mundo, tan solo hay que recordar los estilismo idénticos por los que apostaba Katie Holmes con su hija Suri Cruise, las numerosas ventajas de esta moda está motivando que cada vez haya más progenitores que se decantan por esta opción del matching. Y no solo famosas como la modelo Alessandra Ambrossio, la cantante Beyoncé o la estrella televisiva Kim Kardashian, que asemejan sus looks a los de sus hijas (o viceversa).

Así que, a lo largo de este post vamos a descubrir qué tiene de especial que padres e hijos vistan igual y que sea la opción habitual para muchas personas. Eso sí, todo ello de manera natural y teniendo en cuenta la opinión de los menores, ya que de lo que se trata es de que sea algo divertido y espontáneo, no una obligación. Por ello, no es de extrañar ver cómo, de un tiempo a esta parte, es habitual que las firmas de ropa estrenen colecciones pensadas para esas madres que quieren vestir igual que sus hijas o a esos padres que desean ser el "alma gemela" de su retoño. Incluidas las firmas de ropa de baño.

Por eso, que padres e hijos vayan totalmente conjuntados se está convirtiendo en una tendencia que gana cada vez más adeptos en nuestro país. Ya sea con estampados, con colores llamativos, con el total black o, simplemente, usando los mismos complementos.

5 motivos a tener en cuenta

Entendido algo divertido y espontáneo, como comentábamos antes, que, a la vez, potencia una serie de valores a tener en cuenta en la familia, tales como el amor, la unidad y la armonía.

1. Diversión: se trata, sin duda, de una iniciativa divertida para todos, desde el momento en que se escogen las prendas hasta el de lucirlas juntos, además de que proporciona a los hijos la oportunidad inmejorable de sentirse mayores.

2. Es práctico: si planificamos en equipo las prendas que nos vamos a poner cada día o durante el fin de semana vamos a evitar tener que emplear mucho tiempo en decidir qué nos ponemos.

3. Se refuerzan los vínculos: sobre todo porque, al ir de compras con los niños y elegir un look conjuntado constituye una experiencia positiva que afianza los vínculos afectivos entre padres e hijos.

4. Eleva la autoestima de los miembros de la familia: porque ser diferentes nos va a ayudar (a todos) a sentirnos más a gusto con nosotros mismos.

5. Destaca nuestro aspecto: con esta idea de ir conjuntados estamos vamos a destacar, sin duda, y reflejaremos un aspecto especial que sorprenderá gracias a nuestros outfits.