Las proteínas nos van a ayudar a incrementar la masa libre de grasa. Porque la principal función de estas macromoléculas, formadas por cadenas lineales de aminoácidos, es promover el desarrollo de los tejidos musculares, a la vez que les ayuda a recuperarse rápidamente. Además de que las proteínas determinan la estructura de las células, entre otras funciones, de tal manera que puedan defenderse de agentes externos, reparar daños, mantener la integridad, etc., así como para los huesos, piel, tejidos y órganos Por lo que, tomadas antes o después de realizar ejercicio físico, nos van a resultar muy beneficiosas.

Debemos tener en cuenta que las proteínas se encuentran en muchos alimentos de los que comemos a diario, porque puedes encontrar proteínas en el jamón serrano, el atún al natural, la ternera, las gambas, la pechuga de pavo, el yogur o los huevos, entre otros. Por ello, la proteína no es solo importante para las personas que realizan ejercicio físico, sino también para el crecimiento y el desarrollo de niños, adolescentes y mujeres embarazadas. Además, cuanto más activos somos, mayor es la importancia de la proteína en nuestro organismo.

La proteína animal procede de las carnes magras (pollo, pavo y conejo) y es perfecta para ganar masa muscular, mientras que las proteínas de origen vegetal poseen un bajo contenido en grasas y ayudan a reducir los niveles de colesterol.

Principales beneficios

Y como la función de la proteína es indispensable para nuestro organismo, vamos a enumerar algunos de los beneficios fundamentales de tomar proteína. ¡Toma nota!

1. La proteína te da la sensación de saciedad: promueve la saciedad, o la sensación de plenitud, más que los carbohidratos y las grasas. Esto puede ser beneficioso para los atletas que a menudo alimentan sus cuerpos para rendir durante largos períodos de tiempo.

2. Potencia potencia el metabolismo: además de reducir el apetito, comer proteína potencia temporalmente el metabolismo. El cuerpo usa energía para digerir y hacer uso de los nutrientes en los alimentos. Esto se llama el efecto térmico de los alimentos (TEF), y el efecto térmico de las proteínas es mucho mayor que el de los carbohidratos y las grasas.

3. Ayuda a mantener los músculos: es la piedra angular de nuestros músculos, de ahí que comer cantidades adecuadas de proteína ayuda a mantener la masa muscular y evitar su desgaste. Entonces, si caminas mucho, disfrutas del ciclismo o haces algún tipo de ejercicio para mantenerte activo, necesitas comer proteína.

4. Son ideales para la recuperación y crecimiento muscular: porque no solo ayuda a prevenir la degradación muscular, sino que también puede ayudar a desarrollar y fortalecer los músculos. La combinación de ejercicio regular con un alto consumo de proteínas promueve el crecimiento muscular y el fortalecimiento.

5. Es buena para el cuerpo: porque forma los bloques de construcción principales de los tejidos y órganos. Comer una dieta alta en proteína puede ayudar a tu cuerpo a repararse más rápido después de una lesión.