Cada luna llena del año tiene un nombre especial que proviene de culturas de todo el mundo. Por lo general, estos nombres se refieren a la estación, y la apariencia de la luna, la cual cambia dependiendo de si estamos en un año de doce o trece lunas. La Luna de la Cosecha es un nombre especial, ya que se refiere a la luna llena más cercana al equinoccio de otoño (en el hemisferio norte).

Se llama así porque, en esta época del año, la luna llena tiende a salir alrededor del atardecer durante varias noches seguidas, lo que brinda a los agricultores un poco de luz adicional para trabajar durante la vital temporada de cosecha. Por lo general, sale en algún momento de septiembre, pero también puede aterrizar en octubre.

Equilibrio en el equinoccio de otoño

El equinoccio de otoño (a menudo conocido hoy como Mabon) se celebraba ampliamente en la antigua sociedad celta. Era el festival de la cosecha intermedia entre Lughnasadh (el 1 de agosto) y Samhain (el 31 de octubre).

Aquí estamos justo en la mitad de la temporada de cosecha, que es un momento de abundancia y celebración, pero también es un momento de preparación para el invierno, la mitad oscura del año, cuando entramos adentro y esperamos que la cosecha nos dure hasta la primavera.

El equinoccio es un momento de equilibrio; de igualdad entre la mitad oscura y la mitad brillante del año. Las horas de luz y noche están equilibradas de manera uniforme, lo que puede parecer un momento muy dulce y tranquilo. Es un buen momento para pensar en la igualdad y las relaciones . Tiene un poco de romance, especialmente si piensas en la famosa oda al amor duradero de Neil Young, llamada "Harvest Moon": " Porque todavía estoy enamorado de ti / Quiero verte bailar otra vez / Porque todavía estoy enamorado de ti / En esta Luna de Cosecha..."

La llegada de la oscuridad

Cada uno de los sabbats de la Rueda del Año marca el paso del tiempo. Si bien el equinoccio de otoño tiende a ser un dulce momento de igualdad entre la luz y la oscuridad, también es un momento en el que la oscuridad está a punto de comenzar a tomar el relevo de la luz. Desde aquí hasta el solsticio de invierno, las noches seguirán siendo más largas que los días. La oscuridad gana.

Si bien esto puede parecer un poco melancólico, también puede ser dulce a su manera. La mitad oscura del año es un movimiento que se aleja de la extroversión de la primavera y el verano hacia el otoño y el invierno, más contemplativos y de mentalidad espiritual.

Mucha gente piensa en septiembre como una especie de año nuevo enérgico: a medida que salimos del verano de celebración, muchos de nosotros estamos listos para emprender nuevos proyectos, intentar cosas nuevas en el trabajo y dirigirnos hacia adentro para trabajar en nuestro ser intelectual.

Por supuesto, esta también es la temporada de regreso a clases. Es un cambio en nuestra energía de la mitad extrovertida y brillante del año hacia la mitad introvertida y oscura.

Cosechando tu cosecha espiritual

La Luna de la Cosecha, entonces, es un momento para considerar tu cosecha espiritual. ¿Qué has estado cultivando durante el verano? ¿Qué recursos traes contigo a la parte más intelectual del año? La cosecha es a la vez atraer y soltar: recolectamos las frutas y verduras buenas y eliminamos las plantas que no queremos o necesitamos en nuestros jardines. Este es un momento para abandonar hábitos, planes o comportamientos que no te funcionan para despejar el camino para este nuevo cambio de energía.

En esta Luna de Cosecha, tómate un tiempo para ver dónde te encuentras en tu vida. Piensa en el estado de tu trabajo o proyectos, así como en el estado de tus relaciones. Desde este lugar de contemplación, considere dónde le gustaría poner su atención y energía a medida que avanzamos hacia el próximo giro de la Rueda del Año.

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