Al plátano de Canarias, aquel recubierto con una monda lisa de color amarillo y unas discretas motitas negras y de sabor dulce, se le une un nuevo compañero en el terreno de juego. Se trata de un plátano revestido de un llamativo color azul, que no pasa desapercibido ni en ...
Al plátano de Canarias, aquel recubierto con una monda lisa de color amarillo y unas discretas motitas negras y de sabor dulce, se le une un nuevo compañero en el terreno de juego. Se trata de un plátano revestido de un llamativo color azul, que no pasa desapercibido ni en lo que respecta a su aspecto externo ni a su sabor, puesto que sabe a helado de vainilla. De momento habrá que esperar para que llegue a los lineales del supermercado y fruterías para poder probarlo porque aún está en fase de experimentación. De momento, los isleños dado sus primeros pasos para su cultivo en la isla. Cuando la fruta todavía no está apta para su consumo, muestra este color. Sin embargo, a medida que va avanzando en su proceso de maduración, ya se va aproximando más a los colores del plátano que estamos habituadas a ver, según informan en la página web de ecured.cu.
`Blue Java Banana´, que es así como se le conoce a esta variedad, está presente en otros países como "Hawái, Filipinas y Centro América", aunque es posible también verla en "Estados Unidos", aseguran en la web. ¿Pero cómo se consigue que exhiba esta tonalidad tan característica? No tiene nada que ver con una alteración genética de la fruta, sino que es más bien "un híbrido de dos especies de bananos nativos del sudeste asiático: Musa balbisiana y Musa acuminata", exponen. Este plátano destaca por su color, sabor y textura cremosa, y su planta lo hace por ser "muy resistente al frío", llegando a soportar temperaturas de -5º.
Quién sabe, quizás dentro de unos años este tipo de fruta esté tan extendida como lo está el plátano rojo que introdujo la Federación Agrícola de Sindicatos de Tenerife (FAST). En este caso, su monda luce unos tonos rojizos. Reconocen que "es más dulce que la variedad habitual" y su sabor es similar a una "frambuesa o a los frutos rojos", aseguran en la web de la lafast.org. Del mismo modo que podemos consumir el plátano en crudo, incorporarlo a nuestras recetas dulces o saladas, con estos dos tipos también es posible hacerlo. Este ejemplar, en concreto, proviene de "la misma especie botánica que los amarillos", explican. La primera vez que se tuvo constancia de él, fue "hace más de 20 años", cuando llegó "la primera semilla de plátano rojo, procedente de La Martinica", manifiestan desde FAST.
FOTO PRINCIPAL.: Foto de cottonbro studio.