Honimunn, la única agencia de viajes especializada en Lunas de Miel a medida invita a las parejas a emprender su primera aventura como casados y pasar una Luna de Miel de ensueño en Japón, uno de los destinos más fascinantes de Asia.

Japón es un país compuesto por cuatro islas principales que se encuentran entre el continente asiático y el Océano Pacífico. Es un destino que se caracteriza por su cultura milenaria y las tradiciones más ancestrales mezcladas con las más modernas y cosmopolitas ciudades.

Un viaje de novios en Japón está repleto de experiencias únicas y diferentes: desde su rica gastronomía, sus ceremonias del té, vivir el florecimiento de los cerezos, conocer sus tradiciones ancestrales y su extensa cultura, hasta dormir en alojamientos fuera de lo comúnmente conocido en occidente. Todo ello lo convierte en una experiencia perfecta para vivir un viaje de novios inolvidable.

Osaka se trata de la tercera ciudad más grande de Japón, un lugar donde priman la gastronomía y el entretenimiento. Kioto es la combinación perfecta entre modernidad y tradición. En este lugar se puede encontrar más de mil templos budistas, palacios o jardines, incluso algunos de ellos están declarados como Patrimonio de la Humanidad.

Takayama es el punto perfecto para visitar pueblos onsen, característicos por sus aguas templadas, ricas en minerales y con propiedades saludables, muy comunes en Japón. En este lugar, las parejas de recién casados podrán apreciar un ambiente medieval muy bien conservado donde alojarse en ryokans, alojamientos tradicionales japoneses. Por otra parte, Hakoke se considera una de las mejores ciudades onsen de Japón, donde poder apreciar sus fascinantes paisajes y disfrutar de un baño en sus aguas.

Para visitar unos de los jardines más bonitos del país, es imprescindible visitar Kanazawa, donde además, uno de sus principales atractivos es el barrio de las geishas o las casas de té.

Por su parte, la ciudad de Nara posee diferentes e impresionantes templos y jardines que visitar en el viaje a Japón. Asimismo, los ciervos sika, considerados animales sagrados, están presentes en toda la zona. La antigua Nara, es además un conjunto de monumentos históricos que son Patrimonio de la Humanidad. 

Rodeada de montañas, Shirakawago es una de las aldeas que consigue resistirse al paso del tiempo. Aquí se pueden encontrar las típicas casas japonesas estilo gassho-zukuri cuya característica principal son sus tejados inclinados a dos aguas realizados de paja, muchas de ellas construidas desde 1800 y consideradas también Patrimonio de la Humanidad desde 1995.

Por último, Japón también se caracteriza por tener una de las ciudades más fascinantes del mundo: su capital, Tokio. Es una parada imprescindible en la Luna de Miel y, a pesar de que ni un mes sería suficiente para llegar a conocer esta ciudad, sin duda hay que vivirla. Cada barrio esconde un atractivo diferente, como por ejemplo Shibuya o Harajuku que reúnen la moda, la gastronomía y la música más de moda de Japón.

Otra de las visitas en este viaje dentro de la capital nipona es el barrio de Ginza, caracterizado por ser uno de los más lujosos. Aquí se pueden observar grandes edificios, centros comerciales y una amplia oferta gastronómica. Además, dentro de este barrio se encuentra el Palacio Imperial.

A pesar de que Japón es un destino muy completo, es ideal para combinarlo con Maldivas, Tailandia, Polinesia Francesa o Bali.