El cólico nefrítico suele ser debido a la acumulación de cálculos urinarios (piedras en el riñón) debido, normalmente, a un déficit en la ingesta de agua que provoca una obstrucción en las vías urinarias y la aparición repentina y brusca de un dolor intenso en la región lumbar que avanza hacia el abdomen y la pelvis.

Entre los síntomas del cólico nefrítico destacarían:

1-Dolor que se inicia en la región lumbar y avanza hacia la zona delantera, pudiendo llegar a la pelvis.

2-Alteraciones en la orina. Pueden presentarse disuria (dificultad o dolor al orinar), polaquiuria (necesidad de orinar muchas veces y en cantidades escasas, acompañada o no por una sensación de necesidad urgente de orinar), hematuria (sangre en la orina en pequeñas cantidades o que puede llegar a ser visible) y anuria (en la que no hay secreción de orina).

3-Malestar general. Se presentan fiebre, sudoración, náuseas y vómitos, entre otros.

La causa más habitual del cólico nefrítico es la obstrucción provocada por la acumulación de sales minerales que se convierten en un cálculo o piedra, que impide el avance de la orina desde el riñón hacia la vejiga. Además, se reconoce la influencia de la baja ingesta de líquidos y la tendencia genética a formar cálculos.

El cólico nefrítico se considera un problema muy frecuente, especialmente en los hombres, porque aproximadamente entre el 5 % y el 12 % de la población de los países industrializados presenta algún episodio relacionado con este problema antes de cumplir los 70 años. La mayor parte de las personas que sufren estos cálculos acaban expulsándolos, pero la probabilidad de que vuelva a aparecer, al cabo de unos años, son altas.

El diagnóstico debe hacerlo el médico. Se basa en la realización de pruebas específicas. El análisis de orina y sangre sería primordial. También se recomienda una radiografía de abdomen y una ecografía renal y vesical, que permiten visualizar la ubicación y dimensiones del cálculo y su repercusión sobre el riñón. Si fuera preciso se solicitaría una tomografía axial computarizada (TAC).

El tratamiento se centra en reducir el dolor con analgésicos y antiinflamatorios y lograr la expulsión de la piedra mediante el consumo de abundantes líquidos. Cuando los cálculos no pueden deshacerse con este tratamiento puede ser preciso extraerlos si así lo decide el médico. De manera general, en el 70 % de los casos diagnosticados se expulsa la piedra por sí sola.

La prevención del cólico nefrítico se centra en mantener una correcta hidratación mediante la ingesta de una cantidad adecuada de agua, incluir en la dieta alimentos ricos en agua y evitar consumir alimentos ricos en sal y proteínas (como carnes o huevos, entre otros).