En términos más simples, la intuición se basa en prestar atención a nuestros instintos, a confiar en que aquello que no sabes por qué lo sabes exactamente, al final se da, ocurre, y es una guía poderosa, así que ¿por qué es tan importante confiar en ella y dejarte llevar? Todas ...
En términos más simples, la intuición se basa en prestar atención a nuestros instintos, a confiar en que aquello que no sabes por qué lo sabes exactamente, al final se da, ocurre, y es una guía poderosa, así que ¿por qué es tan importante confiar en ella y dejarte llevar?
Todas tenemos una historia en la que o hemos hecho caso a nuestra intuición y hemos descubierto que era precisa, o quizás nos hemos arrepentido de haber ignorado su guía sutil, y nos hemos dicho internamente: "Debería haber hecho caso a mi intuición. Pero, ¿qué es exactamente esta brújula interior y cómo podemos cultivar una conexión constante con ella?
La clave para abrir nuestros dones y aumentar nuestra constancia es conocernos tan bien a nosotras mismas que no flaqueemos. Se trata de tener límites sólidos, y cuanto más profundamente comprendas tus propios límites y cuáles son, más se abren tus dones y más precisa se vuelve tu intuición.
Estos dones pueden incluir, entre otros: sentir las emociones de otras personas, tener premoniciones, saber (o tener un presentimiento), sentir sensaciones en el cuerpo, escuchar frecuencias etc... Para todos estos regalos, es muy simple: se trata de generar confianza dentro de ti misma. Confiar en ti misma significa escuchar ese sentimiento dentro de ti: tu intuición. Es esa sensación de saber algo sin entender realmente por qué. He aquí por qué es importante:
Hoy, te proponemos algunas formas sencillas de empezar a confiar en ti misma y abrir tu intuición:
Párate en silencio: busca un lugar tranquilo para sentarte y estar contigo mismo. Podría ser en la naturaleza o incluso simplemente en tu habitación. Deja que tu mente se relaje y observa qué pensamientos y sentimientos surgen. La meditación es la forma más rápida de desarrollar una intuición precisa.
Escríbe tus intuiciones: cada vez que tu intuición acierte, te será útil anotar la fecha, cómo te sentiste, qué era lo que estabas intuyendo y cómo se hizo realidad. Esto le ofrecerá algunas pistas sobre su lenguaje de intuición específico.
Escucha a tu cuerpo: presta atención a cómo se siente su cuerpo en diferentes situaciones. Tu intestino a menudo habla a través de sensaciones físicas como una opresión en el pecho o un aleteo en el estómago. Tomarse el tiempo para ser consciente de regresar a tu cuerpo y sentir realmente lo que está sucediendo te ayudará a comprender el lenguaje de tu don.
Confía en ti misma: cree en tus propios instintos y decisiones. Incluso si no tienen sentido para los demás, confía en que sabes qué es lo mejor para ti. La mejor manera de conocerte a ti mismo es comprender profundamente tus límites.
Mantente curiosa: estáte abierta a nuevas experiencias e ideas. A veces, nuestra intuición nos guía hacia cosas que de otra manera nunca hubiéramos considerado. Al mantener la curiosidad, te abres a una comprensión más profunda y rápida de quién eres realmente y cómo funcionan tus dones.
Desarrollar tu intuición es una habilidad que podemos cultivar: se trata de honrarte a ti misma y apoyarte en los dones con los que naciste. Ahora, sé que este es un enfoque muy amplio para desarrollar tu intuición. Debido a que cada persona es singularmente diferente y desarrolla sus sentidos de muchas maneras, yo puedo ayudarte a que continúes hacia lo que de verdad deseas...durante una sesión de Registros Akáshicos puedes conocer los mensajes que guardas en tu interior y que salen a la luz revelándote tu verdad, tu sentido y, en definitiva, tu paz.
Foto principal: Freepik
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