El verano es una época ideal para desconectar de las pantallas y conectar con la familia a través de divertidos juegos de toda la vida. Seguro que muchos de los que vamos a compartir en estas líneas han formado parte de tu vida y, con seguridad, de tus mejores recuerdos. 

1. El escondite

Este clásico nunca pasa de moda. Todos los miembros de la familia pueden participar, y lo mejor de todo es que se puede jugar en casi cualquier lugar. Solo necesitas un poquito de imaginación y muchas ganas de divertirte.

2. La rayuela

También conocido como "tejo" o "resbaladilla", la rayuela es perfecto para jugar en la calle o en el jardín. Para disfrutar a la rayuela necesitas una tiza para dibujar las casillas y una piedra pequeña. La rayuela, además de divertirte, ayuda a los más pequeños a mejorar su equilibrio y coordinación.

3. La cuerda

Saltar a la cuerda se puede hacer de forma individual o en grupo. Si se juega en grupo, dos personas sujetan la cuerda mientras los demás saltan. A través de este juego, hace ejercicio toda la familia y se mejora la la resistencia cardiovascular.

4. Carreras de sacos

Tan solo necesitas algunos sacos viejos de yute y muchas ganas de pasártelo bien. Las carreras de sacos son perfectas para una tarde en el jardín o en el parque, y garantizan risas y diversión para todos.

5. El pañuelo

Divide a la familia y amigos en dos grupos. Los jugadores de ambos equipos deben correr a coger el pañuelo y volver a la base sin ser atrapados. Este juego es ideal para promover a competencia sana y el trabajo en equipo. ¡Las risas están aseguradas!

6. La cuerda floja

Con un poco de creatividad, podéis simular una cuerda floja con una cuerda o incluso una línea dibujada en el suelo. Los jugadores deben caminar de un extremo al otro sin perder el equilibrio. Este juego ayuda a mejorar la concentración y la coordinación motora.

7. El juego de las sillas

Un juego ideal para que jueguen grandes y mayores, ya que anima cualquier fiesta. Para jugar a las sillas, estas se colocan en círculo, pero siempre una menos del número de jugadores que participan. Con música de fondo, los jugadores van andando alrededor de las sillas y, al parar la música, todos se tienen que sentar, el que quede de pie estará eliminado. 

8. La gallinita ciega

El jugador que tenga los ojos vendados tiene que ir atrapando a los demás. Con este juego se desarrollan los sentidos del oído y mejora la orientación espacial de manera efectiva y segura. 

9. Pilla-pilla

Este juego de persecución es ideal para gastar energía y cansar a los niños. Un jugador debe atrapar a los demás tocándolos con la mano, convirtiéndolos en el nuevo perseguidor.

10. Las cuatro esquinas

Se necesita un espacio con cuatro esquinas bien definidas y cinco jugadores. Uno se queda en el centro y los demás deben intercambiar esquinas sin ser atrapados por el del centro. Este juego desarrolla la agilidad y la rapidez de reflejos.