Desde la firma nutricosmética 180 the concept dan todas las claves. "Dos de los factores que juegan un mayor papel en esta cuestión es la estructura del cuerpo y la forma en que la grasa se distribuye en él, ambos afectan a la absorción y efectividad de los ingredientes que se ...
Desde la firma nutricosmética 180 the concept dan todas las claves. "Dos de los factores que juegan un mayor papel en esta cuestión es la estructura del cuerpo y la forma en que la grasa se distribuye en él, ambos afectan a la absorción y efectividad de los ingredientes que se ingieren. Sabiendo ambas cuestiones se puede actuar en consecuencia", indica Gema Cabañero, directora de I+D+i de la firma.
Así pues, según la distribución de la grasa en el cuerpo y de la estructura, se diferencia entre morfología androide o morfología ginoide.
"Esta clasificación es esencial en nutricosmética, ya que ambos tipos de cuerpos presentan diferentes necesidades nutricionales, puesto que el sistema hormonal es aquí el gran protagonista" explica Gema Cabañero.
Dentro de la morfología androide se puede diferenciar entre tres subtipos de figura. "Todas se caracterizan porque la grasa, principalmente, se acumula en la parte superior del cuerpo", añade la experta.
En cuanto a la morfología ginoide, la experta menciona que "se caracteriza por la acumulación de grasa en la parte inferior del cuerpo. Se suele conocer comúnmente como morfología pera". Esta morfología se distingue por tener una estructura corporal con hombros estrechos y caderas más anchas. La mayor parte de la grasa se acumula en la zona de caderas, muslos y glúteos.
"En esta morfología es importante destacar el papel de las hormonas femeninas y masculinas. Los estrógenos, las hormonas sexuales femeninas, son las principales responsables de esta particular distribución de grasa. Por su parte, la progesterona, también juega un papel clave en la retención de líquidos y en la percepción de volumen en la parte inferior del cuerpo", indica Cabañero.
Los cambios en los niveles de estrógenos, como los que ocurren durante la menopausia, pueden provocar una redistribución de la grasa hacia el área abdominal, convirtiendo la morfología en más androide.
"En base a estas categorías y sus subtipos, los profesionales podremos realizar una combinación nutricional determinada para resolver problemas estéticos aparentemente parecidos, como puede ser la pérdida de grasa, pero que en cada caso tendrán una causa diferente" añade la experta.