Aunque muchas veces ha sido un tema silenciado o estigmatizado, cada vez más mujeres están hablando abiertamente de sus cambios hormonales, físicas y emocionales… y eso es poderoso. En este artículo, queremos contarte qué ocurre en el cuerpo durante la menopausia, cómo impacta en tu salud y, sobre todo, cómo ...
Aunque muchas veces ha sido un tema silenciado o estigmatizado, cada vez más mujeres están hablando abiertamente de sus cambios hormonales, físicas y emocionales… y eso es poderoso. En este artículo, queremos contarte qué ocurre en el cuerpo durante la menopausia, cómo impacta en tu salud y, sobre todo, cómo puedes vivir este proceso con equilibrio y bienestar.
La menopausia es un proceso biológico natural que marca el final de la etapa fértil. Se considera que una mujer está en menopausia cuando han pasado 12 meses consecutivos sin menstruación, generalmente entre los 45 y 55 años. Pero los cambios comienzan mucho antes, en una fase llamada perimenopausia, que puede durar entre 4 y 8 años.
Durante este tiempo, los ovarios van disminuyendo gradualmente la producción de estrógenos y progesterona, lo que genera una serie de síntomas que varían en intensidad de una mujer a otra.
Algunos de los síntomas y cambios más frecuentes en esta etapa tienen que ver con sofocos y sudores nocturnos, que afectan el descanso y la calidad de vida; alteraciones del sueño, como insomnio o despertares frecuentes; cambios de humor, ansiedad, irritabilidad o tristeza inexplicable; aumento de peso, especialmente en la zona abdominal o pérdida de masa ósea, con un mayor riesgo de osteoporosis.
Aunque puedan parecer muchos, estos síntomas no deben vivirse en silencio ni con resignación. Existen formas efectivas de aliviarlos y acompañarlos con respeto por tu cuerpo y tus emociones.
Cómo cuidar tu bienestar hormonal y emocional
- Alimentación consciente y equilibrada: Una dieta rica en vegetales, frutas, proteínas magras, granos enteros y grasas saludables (como las del aceite de oliva o las semillas) ayuda a mantener el equilibrio hormonal y controlar síntomas como los sofocos o la fatiga. Incorpora alimentos ricos en calcio, magnesio y vitamina D para cuidar tus huesos, y considera incluir fitoestrógenos naturales (como la soja o las semillas de lino), que pueden ayudar a equilibrar los niveles hormonales.
- Movimiento con propósito: Hacer ejercicio regularmente mejora el estado de ánimo, ayuda a mantener el peso, fortalece los huesos y regula el sueño. Lo ideal: combinar ejercicios aeróbicos, de fuerza y flexibilidad. Elige actividades que disfrutes: caminar, nadar, yoga, pilates o bailar son excelentes opciones.
- Apoyo médico y opciones terapéuticas: Consulta con tu ginecóloga o endocrina para hablar sobre terapias hormonales, alternativas naturales o suplementos. Cada cuerpo es único y merece un enfoque personalizado.
También puedes explorar terapias complementarias como la acupuntura, la fitoterapia o el yoga hormonal, que muchas mujeres encuentran beneficiosas.
- Autocuidado emocional: Los cambios hormonales también afectan nuestras emociones. Es normal sentirse más sensible o vulnerable. Practicar mindfulness, escribir un diario, hablar con una terapeuta o compartir en círculos de mujeres puede ayudarte a canalizar lo que sientes y darte el espacio que necesitas.
- Reinvención y redescubrimiento: La menopausia es una gran oportunidad para redescubrirte. Es momento de preguntarte: ¿Qué necesito ahora? ¿Qué me hace bien? ¿Qué ya no quiero en mi vida? Priorízate, rodéate de personas que te nutran y reconecta con tu propósito desde esta nueva versión de ti.
La menopausia no es una pérdida, es una transición. Es una invitación a cambiar el ritmo, a mirarte con más amor y a reconectar con tu sabiduría interna. No estás sola, ni eres la única: somos muchas mujeres transitando este camino juntas.