Calcular la cantidad de cafeína que ingerimos a diario, implica la necesidad de computar las tazas de café y los demás alimentos que la contienen, sin excedernos en su ingesta. Se considera fundamental evitar el consumo que los jóvenes realizan de bebidas cargadas de cafeína que no resultan adecuadas para el cuidado de su salud.

Las dudas sobre su consumo surgen cuando se publican noticias relacionadas con la cafeína y sus efectos negativos sobre la salud. Afectan especialmente a personas con problemas cardíacos y que asocian el consumo excesivo de cafeína con el de altas cantidades de alcohol. Numerosos estudios indican que la cafeína reduciría la posibilidad de padecer diabetes tipo 2 y que no es posible asociar directamente su consumo con el padecimiento de enfermedades cardíacas. Algunos especialistas señalan que el consumo moderado de cafeína reduciría la probabilidad de padecer enfermedades coronarias y el nivel de triglicéridos en la sangre. Consulta a tu médico.

Los expertos recomiendan realizar un consumo racional sin superar las cantidades diarias recomendadas para evitar los efectos secundarios negativos que la cafeína puede provocar en el organismo. La cantidad diaria recomendada varía en función de la edad. Adolescentes, niños y adultos no toleran la cafeína de la misma forma pero, en ninguno de estos grupos de población, debe ser muy alta.

La palabra cafeinismo describe la intoxicación por cafeína en la que se presenta una activación del sistema dopaminérgico. Se produce con dosis de cafeína superiores a 250 mg (se calcula que una taza de café contiene 100-150 mg). Un consumo de más de 10 gramos puede originar la muerte. Cursa con inquietud, nerviosismo, taquicardia, arritmias, insomnio, aumento de la diuresis, contracciones musculares y dolor de cabeza. Acude al médico si notas estos síntomas.

Los especialistas señalan que, entre los efectos de la cafeína en nuestro organismo, destacarían:

1-Aportaría compuestos de interés. El metabolismo de la cafeína produce teofilina (aumenta el ritmo cardíaco), teobromina (incrementa los niveles de oxígeno cerebral) y paraxantina (mejora el rendimiento físico).

2-Estimularía el funcionamiento cerebral. La cafeína es un compuesto estructuralmente similar a la adenosina y es capaz de bloquearla en los receptores cerebrales. Así mejoraría la actividad mental y tendría efectos positivos a nivel del estado de ánimo.

3-Facilitaría el despertar. Se considera que contrarresta los efectos de la melatonina que sigue circulando por nuestro organismo al levantarnos.

4-Presentaría capacidad antioxidante. El café aporta ácido clorogénico, considerado un buen antioxidante.

5-Provocaría efectos negativos a nivel de la visión. Se está estudiando la relación entre un consumo excesivo y la aparición de alteraciones a nivel ocular.

6-Se le atribuye efecto analgésico. Actuaría a nivel de los receptores específicos y reduciría el dolor.