La ansiedad es un problema que afecta a un elevado porcentaje de la población en todos los segmentos de edad. Se considera que presenta una tríada en la que se asocian pensamiento, emoción y acción, que generan síntomas físicos y psicológicos. Los especialistas señalan la existencia de varias técnicas sencillas ...
La ansiedad es un problema que afecta a un elevado porcentaje de la población en todos los segmentos de edad. Se considera que presenta una tríada en la que se asocian pensamiento, emoción y acción, que generan síntomas físicos y psicológicos.
Los especialistas señalan la existencia de varias técnicas sencillas y eficaces que pueden ayudarte a gestionar correctamente la ansiedad. En ningún caso pueden sustituir las indicaciones y consulta a un profesional. Destacarían:
1-Ensayo mental
Es una técnica recomendada para ser utilizada antes de afrontar situaciones en las que no te sientes segura. Consiste en imaginarte que estás viviendo esa incómoda situación y lo estás haciendo bien y te sientes relajada y segura. Es necesario practicar mentalmente lo que vas a decir y hacer y repetirlo varias veces, hasta que empieces a sentirte más relajada y segura.
2-Cambio de pensamiento
Esta técnica puede utilizarse antes, durante o después de vivir la situación que genera malestar. Se centra en el control del pensamiento de manera que, cuando te empieces a encontrar incómoda, nerviosa o alterada, analiza tus pensamientos e identifica los que tienen connotaciones negativas y cambia esos pensamientos por otros más positivos. Puede resultar complicado identificar los pensamientos negativos, darles la vuelta y convertirlos en pensamientos positivos. Es preciso practicar para poder conseguirlo.
3-Relajación muscular progresiva
Puedes aplicar esta técnica antes, durante y después de encontrarte en la situación temida, pero es necesario hacer un entrenamiento previo para que resulte eficaz. Para realizarla es preciso seguir unos pasos concretos y practicarlos con tanta frecuencia como sea posible. Se recomienda hacerlo al menos una vez al día durante 10 minutos para conseguir automatizar el proceso y poder relajarte con facilidad y rapidez.
4-Respiración profunda
Es una técnica fácil de aplicar y útil para controlar las reacciones fisiológicas que se presentan antes, durante y después de enfrentarse a situaciones emocionalmente complejas. Implica realizar distintas fases de respiración de forma lenta y un poco más intensa de lo habitual, sin llegar a forzarla en ningún momento. Puedes comprobar que estás realizando la respiración correctamente poniendo una mano en el pecho y otra en el abdomen. Cuando consigas que sólo se mueva la mano que tienes sobre el abdomen al respirar estarás haciéndolo correctamente.
5-Técnicas de exposición para conseguir un correcto afrontamiento
La desensibilización sistemática, la inundación y la exposición graduada con o sin prevención de respuesta, son técnicas de exposición que resultan eficaces para varios problemas de ansiedad y para afrontar a diario los miedos que nos llevan a evitar o posponer las situaciones temidas. Estas técnicas ayudan a las personas a afrontar las situaciones, en vez de evitarlas porque facilitan el aprendizaje de que las consecuencias catastróficas anticipadas a la situación que produce ansiedad no ocurren, lo que favorece su afrontamiento con niveles más bajos de ansiedad.