El protector solar: imprescindible todo el año Lo primero que debemos tener claro es que el protector solar no es solo para el verano ni para los días de playa. Los rayos UVA y UVB están presentes durante todo el año, incluso en días nublados. Además, atraviesan los cristales de ventanas, ...
Lo primero que debemos tener claro es que el protector solar no es solo para el verano ni para los días de playa. Los rayos UVA y UVB están presentes durante todo el año, incluso en días nublados. Además, atraviesan los cristales de ventanas, por lo que también afectan a quienes trabajan cerca de una fuente de luz natural. Si queremos prevenir manchas, arrugas prematuras e incluso enfermedades más graves como el cáncer de piel, debemos integrar el fotoprotector en nuestra rutina diaria.
La oferta es inmensa y a veces puede resultar confusa. Aquí van algunas claves:
Parece fácil, pero muchas veces lo hacemos mal. Estos son los errores más comunes que deberías evitar:
Cada vez hay más bases y cremas con FPS. Son una buena ayuda, pero no sustituyen al protector solar tradicional, ya que normalmente aplicamos menos cantidad de maquillaje de la necesaria para conseguir la protección anunciada. Lo ideal es aplicar una capa de protector facial antes del maquillaje y, si puedes, reaplicar con brumas o polvos con FPS durante el día.
Además de usar protector solar, hay otras estrategias que ayudan a mantener la piel sana:
Disfrutar del sol es una maravilla que muchas esperamos todo el año, pero hacerlo de forma consciente es un acto de amor hacia nuestra piel. Protegernos bien no solo nos ayuda a evitar quemaduras, sino que es uno de los gestos antiedad más poderosos que existen. Así que ya sabes: mete el protector solar en el bolso y no lo olvides nunca. Tu piel del futuro te lo agradecerá.