En pleno verano, los golpes de calor en perros se convierten en una urgencia veterinaria frecuente, potencialmente mortal si no se detecta y resuelve a tiempo. A diferencia de los humanos, los perros no sudan por todo el cuerpo: regulan su temperatura mediante el jadeo y a través de las ...
En pleno verano, los golpes de calor en perros se convierten en una urgencia veterinaria frecuente, potencialmente mortal si no se detecta y resuelve a tiempo. A diferencia de los humanos, los perros no sudan por todo el cuerpo: regulan su temperatura mediante el jadeo y a través de las almohadillas de sus patas.
Este sistema es lento e ineficaz ante exposiciones prolongadas al calor, lo que puede derivar en un golpe de calor. De hecho, un porcentaje muy elevado de los casos puede tener consecuencias irreversibles si no se actúa a tiempo. Desde Purina comparten una serie de consejos didácticos y sencillos para ayudar a los tutores de mascotas a prevenir esta situación y actuar de forma eficaz ante los primeros síntomas:
La aceleración del ritmo cardiaco del perro, acompañada de jadeos con hipersalivación, y de una respiración rápida y nerviosa, son algunos de los síntomas de un golpe de calor en perros más evidentes. A estos comportamientos, suelen añadirse otros de igual importancia:
Lo principal es aplicar calma, y actuar de forma rápida y eficiente. Mientras contactamos o accedemos a una clínica veterinaria, podemos aplicarle unos primeros auxilios que le serán de gran utilidad:
La mayoría de las medidas para prevenir un golpe de calor en perros pasa por el sentido común de los tutores. Pero seguir las siguientes pautas, puede ayudarte a tomar conciencia:
Finalmente, desde Purina animan a todos los tutores de mascotas a informarse y actuar con responsabilidad. Prevenir un golpe de calor es sencillo si conocemos los riesgos y tomamos las precauciones adecuadas para cuidarlos y asegurar su bienestar.