Scamper es un acrónimo que representa siete formas de trabajar sobre una idea, producto, proceso o contenido: Sustituir, Combinar, Adaptar, Modificar, Poner en otro uso, Eliminar y Reordenar. Aunque parece simple, aplicarlo de manera consciente puede abrir un mundo de posibilidades que no habías considerado. Una técnica poderosa que te ayuda a transformar ideas existentes y llevarlas a un nivel completamente nuevo.

Sustituir
La primera letra nos invita a pensar en qué elementos de nuestra idea podrían ser reemplazados. Por ejemplo, si tienes un producto o servicio, pregúntate: "¿Qué pasaría si sustituyo un material, un ingrediente o incluso un público objetivo?" A veces, un pequeño cambio de componente puede revolucionar toda la propuesta.

Combinar
La creatividad no siempre significa inventar algo completamente nuevo. Combinar ideas existentes puede generar soluciones únicas. Piensa en cómo fusionar dos servicios, productos o conceptos que a primera vista no parecen relacionados. Por ejemplo, un taller de yoga que combina mindfulness con arte puede atraer a un público completamente diferente y generar una experiencia innovadora.

Adaptar
Adaptar significa tomar algo que ya funciona en otro contexto y ajustarlo a tu situación. Tal vez veas una estrategia de marketing en otro sector que puedes aplicar en el tuyo, o un formato de contenido que, adaptado, conecte mejor con tu audiencia. Esta técnica te enseña que no siempre necesitas reinventar la rueda; a veces solo basta con cambiar el enfoque.

Modificar
Modificar implica alterar características de tu idea: tamaño, color, forma, estructura o incluso el mensaje. Pequeños cambios pueden hacer que un producto o contenido sea más atractivo o funcional. Por ejemplo, un blog de recetas puede modificar la presentación de sus post con videos cortos en lugar de solo texto, haciendo la experiencia más dinámica para los lectores.

Poner en otro uso

Aquí la creatividad se vuelve versátil. Consiste en preguntarte cómo puedes darle un uso diferente a algo que ya existe. Un ejemplo cotidiano: usar frascos de vidrio de mermelada para organizar cosméticos o joyas. Este enfoque no solo es creativo, sino también sostenible y práctico, algo que resuena mucho con un público femenino consciente y creativo.

Eliminar
A veces, menos es más. Esta técnica consiste en quitar elementos innecesarios o complicaciones que no aportan valor. Pregúntate: "¿Qué podría eliminar sin que la idea pierda su esencia?" Al simplificar, tus productos, procesos o contenidos pueden volverse más claros, atractivos y efectivos.

Reordenar
Finalmente, reordenar significa cambiar la secuencia o la forma en que presentas una idea. Puede ser un calendario de contenido, los pasos de un proceso o la estructura de un producto. Cambiar el orden puede generar un efecto completamente nuevo y más eficiente, sorprendiendo a tu audiencia o mejorando la experiencia de uso.

La técnica Scamper es perfecta para quienes buscan innovar, mejorar productos, contenidos o procesos sin necesidad de partir de cero. Su fuerza radica en su simplicidad y en la capacidad de abrir la mente a nuevas posibilidades. Al aplicarla, no solo mejorarás tu creatividad, sino también tu capacidad de resolución de problemas y tu visión estratégica.

En un mundo donde la innovación y la adaptabilidad son clave, Scamper se convierte en una herramienta indispensable. Así que la próxima vez que sientas que tu creatividad está bloqueada, recuerda: no siempre hace falta inventar algo completamente nuevo. A veces, solo necesitas sustituir, combinar, adaptar, modificar, poner en otro uso, eliminar o reordenar lo que ya tienes para crear algo sorprendente.

Por todo ello, Scamper no solo es una técnica: es un recordatorio de que nuestras ideas, con un poco de ingenio y perspectiva, pueden transformarse en oportunidades brillantes que impacten, inspiren y conquisten a quienes nos rodean.