El colágeno es una proteína presente en los huesos, la piel y las articulaciones. Actúa eficazmente a todos los niveles para mantener nuestra juventud, especialmente a nivel dérmico. Las pieles jóvenes son ricas en fibras de colágeno, pero a partir de los 25 años, se reduce la producción y disminuye la elasticidad de los tejidos cutáneos. Es el momento de reintegrarlo utilizando un producto de buena calidad que sea bien absorbido (tanto a nivel de la piel como digestivo).

Los factores que influyen en su reducción son variados. El principal es la edad, pero también podemos destacar la menopausia, el insomnio y los problemas de sueño, el sobrepeso, el consumo excesivo de alcohol y tabaco o la práctica excesiva y descontrolada de ejercicio.

Los especialistas indican que la dosis adecuada es de 10 gramos al día y que es mejor elegir el producto que esté libre de aditivos y azúcares. Puedes encontrarlo en cápsulas, viales, botellas y debe estar hidrolizado para favorecer su absorción. Presenta la ventaja de que es puro y actúa como coadyuvante para que sean nuestras células las que lo fabriquen. La mejoría en la piel tarda en observarse unos meses, pero en las articulaciones se nota antes y te permite hacer ejercicio con mayor facilidad y menor esfuerzo.

Algunos alimentos de la dieta habitual contienen nutrientes que favorecen sus síntesis. Podemos destacar:

-fitonutrientes, el licopeno (pimiento rojo, tomate o ciruela), catequinas (en el té) que evitan su destrucción o antocianidinas (frutos rojos) que lo refuerzan.

-ácidos grasos (3 6 y 9) del salmón o los frutos secos regulan las hormonas que intervienen en el proceso y favorecen la síntesis de colágeno.

-azufre (de las aceitunas o el pepino) favorecen su formación.

-vitamina A (de melón o zanahoria) actúa como coadyuvante para su síntesis.

-fitoestrógenos (como la genicisteína de la soja) que bloquean la actividad de enzimas oxidantes.

-aminoácidos como la lisina (en carnes magras y lácteos desnatados) y la prolina (abundante en la clara de huevo) forman parte de la estructura del colágeno y su consumo favorece su producción.

-coenzima Q10, presente en el pescado o la soja aumenta la capacidad de síntesis de colágeno por parte del organismo.

-vitamina C (de fresas y pimientos) es un perfecto antioxidante que favorece la eliminación de compuestos que lo destruyen.

Cuando te prepares una ensalada, incluye pepino, aceitunas, brotes de soja, huevo cocido, pimiento rojo y tomate. Si haces una macedonia, no olvides las fresas, el melón o los frutos rojos. Estarás aportando a tu organismo una dosis interesante de compuestos que favorecen la salud de tu piel y articulaciones.

Consulta a tu médico su consumo y si es compatible con los medicamentos que te haya pautado. Puedes encontrarlo solo o combinado con otros compuestos con actividad a ese nivel (hialurónico, magnesio, etc.). Lo más importante es que se encuentre hidrolizado y no contenga elementos innecesarios (aditivos, colorantes, azúcares, etc.). Cómpralo en centros adecuados para evitar problemas o fraudes.