Una escritora adicta a la moda (Sarah Jessica Parker), una exitosa abogada (Cynthia Nixon), una empresaria promiscua (Kim Cattrall) y una galerista un poco más puritana (Kristin Davis) son las estrellas de esta serie que ha revolucionado a la crítica de medio mundo. La serie ha convertido a su protagonista y narradora en la serie, Sarah Jessica Parker, en un icono para las mujeres y para la moda. El resto del reparto está compuesto por hombres, y es que en torno a ellos giran las vidas de estas cuatro mujeres.

¿Es feminista Sexo en Nueva York?

Algunos defienden que la serie estadounidense aporta un soplo de aire fresco al movimiento de liberación de las mujeres, por ser las protagonistas cuatro mujeres trabajadoras de cuarenta años que discuten abiertamente de sexo. Otros contraatacan diciendo que no es más que un disfraz, puesto que las actitudes de las protagonistas siguen siendo más bien patriarcales y el fin último no es otro que encontrar al príncipe azul.

Esta cuestión tal vez cabría analizarla teniendo en cuenta que esta serie sobre relaciones amorosas y sexo no sólo ha viajado por Estados Unidos y Europa, sino que ha podido verse en más de veinte países, incluyendo países más conservadores en este sentido como Israel, Rusia o México.

En otros países como China han versionado la serie estadounidense y la han convertido en una película, eso sí, bastante más bajada de tono y con guión descafeinado. Aún así, la película arrasó en las taquillas, desató a la población china, e hizo estragos entre la crítica.

Las cifras

La serie Sexo en Nueva York consta de 94 episodios de 30 minutos cada uno divididos en 6 temporadas, que se emitieron en Estados Unidos entre 1998 y 2004. Se ha estrenado con diferentes nombres en más veinte países de todo el mundo. En nuestro país pudimos ver el primer capítulo el 14 de mayo del 2000, y hemos podido seguir la serie a través de los canales Divinity y Cosmopolitan.

La serie tuvo tan buena acogida entre el público que en 2008 y 2010 se estrenaron las películas Sexo en Nueva York: la película y Sexo en Nueva York II, que, aunque ya no pillaron al público por sorpresa, también consiguieron muy buenas recaudaciones en taquilla. A principios de año, Sarah Jessica Parker y Michael Patrick King, director de la historia, dejaban la puerta abierta a la producción de una tercera película.

Rizando el rizo

Sea como sea, está claro que Sexo en Nueva York aporta un matiz de liberación sexual para la mujer, sea cual sea la magnitud del mismo. Incluso en los países más progresistas en materia feminista, costaba ver como protagonistas de estas tramas a mujeres de cuarenta años, y eso es, indudablemente, un aspecto liberador para un gran sector de la población.

Ahora bien, ¿sabéis qué sería todavía más innovador, rompedor y liberador? Que además de cuarentonas, fueran poco agraciadas y no tuvieran sueldos astronómicos. Lo de Nueva York podemos dejarlo pasar, que a todos nos gusta el telón de fondo. Aquí dejamos nuestro pequeño reto a la parrilla televisiva y a los productores.