Los principios activos procedentes del reino vegetal se han utilizado desde antiguo y, los laboratorios actuales han elaborado diferentes preparados en distintas formas de presentación, dosificaciones, mezclas sinérgicas, etc. encaminadas a mejorar los efectos de sus componentes activos.

La difusión de estos productos ha sido muy alta, siendo numerosos los que se usan actualmente para diferentes situaciones. Entre los de uso más frecuente en la época veraniega se encuentran los asociados a los problemas típicos de esta estación. Destacarían:

-Para mejorar el descanso se recomienda el uso de valeriana, considerada el mejor tranquilizante natural, eficaz para tratar problemas de sueño, ansiedad y angustia que no crea dependencia.

-Si tu problema es el sobrepeso, existen varias opciones de interés. El fucus se utiliza como coadyuvante en dietas de control de peso porque reduce el apetito y tiene efecto laxante. El té verde presenta principios activos que actúan a varios niveles para conseguir una reducción del peso. El glucomanano y el plantago son saciantes y/o reductores de la absorción y deben acompañarse con una gran cantidad de agua para minimizar el riesgo de oclusión intestinal.

-Para eliminar compuestos tóxicos presentes en el organismo suelen aconsejarse plantas depurativas como el diente de león (que se considera depurativo, diurético y laxante siendo muy útil como coadyuvante en dietas de adelgazamiento y para eliminar toxinas y reducir la celulitis), la alcachofa (se considera que favorece la eliminación renal y digestiva) o el boldo (que se considera un perfecto depurador hepático).

-Si te sientes cansado y necesitas un aumento de energía, suele recomendarse el uso de plantas revitalizantes como la levadura (considerada un estupendo suplemento alimentario para mejorar la piel, el cabello y las uñas y reducir el cansancio) o el ginseng (para situaciones que cursan con cansancio, astenia, fatiga general, estrés, agotamiento físico e intelectual o fatiga crónica, pues aumenta los reflejos y revitaliza, mejorando el estado físico y mental).

-Si tu piel se ve afectada por la radiación solar, el agua salda o el cloro de las piscinas, sería recomendable la aplicación de aceite de rosa mosqueta, pues mejora la regeneración, microcirculación y nutrición cutánea, lo que permite reducir arrugas superficiales, aumentar la tersura e hidratar la piel seca, mejora el aspecto de las cicatrices y de las estrías, reduce las manchas de la piel, previene y corrige el fotoenvejecimiento por exposición a las radiaciones solares, activando la melanina.

Estos productos deben ser administrados bajo consejo del especialista, pues aunque se consideran "naturales", presentan efectos secundarios que deben ser tenidos en cuenta. Especial cuidado merecen los pacientes con problemas tiroideos, diabéticos, cardiópatas y polimedicados, así como con fármacos que presentan un estrecho margen terapéutico, cuyos efectos adversos pueden implicar una mayor gravedad. Jamás se recomienda la automedicación ni la sustitución de tratamientos farmacológicos pautados por el médico por ese tipo se compuestos.