El proceso ansioso puede deberse a una situación coyuntural o constituir un trastorno psiquiátrico que requiere la ayuda del médico –y la correspondiente medicación- para resolverse. Los estudios realizados indican que es más frecuente en primavera y otoño, aunque puede aparecer en todas las estaciones, sobre todo en momentos como ...
El proceso ansioso puede deberse a una situación coyuntural o constituir un trastorno psiquiátrico que requiere la ayuda del médico –y la correspondiente medicación- para resolverse. Los estudios realizados indican que es más frecuente en primavera y otoño, aunque puede aparecer en todas las estaciones, sobre todo en momentos como éste de incertidumbre económica.
Las personas ansiosas describen síntomas diversos porque somatizan su ansiedad de manera diferente: insomnio, nerviosismo, cefaleas, dolor de estómago, mareos, hipertensión, etc. Los ansiolíticos alivian los síntomas, pero no actúan sobre la causa que los produce. Para ello, debes cambiar tu estilo de vida, enfrentarte a los problemas de manera optimista, no adelantar acontecimientos negativos, organizarte para no mezclar conflictos, etc. Si no lo resuelves así, acude al médico, quien te prescribirá en caso necesario el ansiolítico adecuado a tu situación (normalmente una benzodiacepina).
Estos fármacos reciben diferentes nombres comerciales que, lamentablemente, resultan bien conocidos para el público general, lo que indica que su consumo es muy habitual. ¡No olvides que sólo debes tomarlos si te los prescriben! Consulta a tu médico.