En el mundo del fitness existen muchas prácticas diferentes. Escoger una u otra modalidad dependerá de las necesidades y forma física de cada persona, aunque algunas son más efectivas que otras.

En el caso que nos ocupa, el cardio en ayunas, es una opción que han adoptado muchas personas por los grandes beneficios que supuestamente conlleva. Si estás planteando adoptarlo en tu vida, antes ten en cuenta esos aspectos fundamentales.

¿Por qué resulta eficaz para perder grasa?

En teoría, lo recomendable para obtener una buena salud física es llevar una alimentación sana y la práctica regular de ejercicio. Dicho esto, correr, andar, nadar, montar en bici o practicar aeróbic son actividades más que suficientes para poder estar sano.

Hacer cardio en ayunas no resulta imprescindible para estar en plena forma. Sin embargo, si estamos al menos 6 horas sin comer nada, los niveles de insulina bajan. En ese momento, el cuerpo recurre a la grasa almacenada para poder funcionar. Si en ese periodo de ayuna realizamos ejercicio, se quema más grasa por lo que adelgazamos de forma inevitable.

De esa forma, el cardio en ayunas puede ser una buena opción para personas que precisan perder algún que otro kilo tras haber alcanzado un índice de grasa corporal normal.

Lo aconsejable es no hacer más de 40 minutos ni llevar a cabo ejercicios intensos. Basta con correr suavemente o caminar a paso ligero. De otra manera, quemaríamos masa muscular, cuando en realidad lo que se pretende es quemar grasa.

A modo de resumen diremos que cuando se está en ayunas, el organismo emplea las grasas almacenadas del cuerpo para obtener combustible. Sin embargo, aunque puede sernos útil para adelgazar, no resulta del todo imprescindible.

Como ya hemos indicado, a la hora de estar en forma y contar con un índice de masa corporal óptimo, basta con hacer ejercicio regular y llevar una dieta sana y equilibrada. Practicar cardio en ayunas no deja de ser un extra para obtener un objetivo más concreto, como puede ser acabar con esos últimos kilos que resultan tan difíciles de eliminar.

El ejercicio cardiovascular en ayunas, ¡la ciencia opina!

En 2014 se llevó a cabo un estudio por varios investigadores en el que se quiso comprobar la efectividad del ejercicio cardiovascular en ayunas dentro de un contexto basado en déficit calórico. Era importante tener en cuenta esto último, pues en otras investigaciones similares se les pasó por alto el control de la ingesta energética de los sujetos a prueba.

En este estudio se pusieron a prueba a varias mujeres de edades que oscilaban entre los 18 y los 35 años. Todas ellas hacían ejercicio de forma regular. Además, se puso especial cuidado para descartar a las candidatas que hubieran sufrido alguna lesión en las piernas o aquellas que tuvieran algún tipo de trastorno cardiovascular o metabólico.

El grupo se dividió en dos equipos y se les dispuso diferentes formas de entrenamiento. Uno de ellos realizó ejercicios de cardio en ayunas y el otro equipo lo llevó a cabo una vez alimentado. En ambos casos perdieron grasa y peso, pero no se encontró ninguna diferencia significativa. De esa forma, prácticamente la pérdida de peso está asociada al déficit energético, sin más.