¿Qué es? Pertenece a la familia de las Asteráceas, entre las que se incluyen varios miles de especies muy diferentes entre sí. De hecho, en este grupo se encuentran por ejemplo la lechuga y la alcachofa. Su nombre científico es Cichorium intybus, y es una hortaliza herbácea de hojas rizadas y ...
Pertenece a la familia de las Asteráceas, entre las que se incluyen varios miles de especies muy diferentes entre sí. De hecho, en este grupo se encuentran por ejemplo la lechuga y la alcachofa.
Su nombre científico es Cichorium intybus, y es una hortaliza herbácea de hojas rizadas y sabor similar a la escarola que se cultiva en zonas templadas con fines alimentarios, pues se utiliza para preparar ensaladas (como si fuera lechuga). Su raíz tostada se ha empleado para preparar un sucedáneo del café o mezclarlo con él en época de crisis, lo que ha devaluado sus propiedades y categoría culinaria injustamente. Con fines medicinales se usan las hojas y la raíz.
Entre los componentes químicos destacan la inulina, sustancias amargas (como la intibina), el ácido clorogénico y los taninos. Se le atribuyen muchas propiedades farmacológicas relacionadas con sus principios activos, aunque no todas se han demostrado científicamente. Es laxante (reduce el estreñimiento), digestiva (facilita la digestión), vermífuga (elimina los gusanos intestinales), ayuda a mejorar las funciones del hígado (tiene efectos depurativos) y alivia la inapetencia y la desgana hacia la comida.
Está contraindicada para quienes tienen tendencia a formar piedras en el riñón o sufrir anemias, tienen la tensión arterial muy baja o padecen úlcera gastroduodenal. No deberían consumirla quienes se encuentran es estos grupos de riesgo, ya que resultan perjudiciales para sus patologías.
Sus características la hacen muy adecuada para consumirla como infusión antes o después de la comida según el efecto que se pretenda: antes de comer sirve para "abrir" el apetito y, después de la comida, actúa como digestivo. La infusión se puede preparar usando 30 gramos de polvo de achicoria, que se hierven en un litro de agua durante tres minutos. Puedes beberla fría o caliente y adicionar azúcar, miel, sacarina o tomarla sin ningún aditivo.
El café de achicoria no contiene aceite esencial ni cafeína y su efecto a nivel digestivo y hepático la convierte en un producto muy interesante como sustituto del café para quienes padecen problemas a estos niveles.
Se han comercializado diferentes productos en los que se presenta como único componente o asociada a otros compuestos con propiedades similares para aprovechar la sinergia entre ellos. Como sustituto del café puedes encontrarla en tiendas especializadas o en supermercados; mira la etiqueta con cuidado y elige lo más adecuado.
Resulta imprescindible recomendar su consumo racional, pues tiene efectos farmacológicos que pueden causar daños al organismo si se consume en exceso. Consulta siempre al especialista sanitario para evitar los efectos negativos de estos productos "naturales", pues se ha demostrado su existencia en los análisis realizados por los expertos.