El mejor regalo para mamá: una bolsa personalizada
Sonia Baños
El próximo domingo se celebra el Día de la Madre, ¿ya habéis pedido vuestro regalo? ¿Qué os parecería que os regalasen algo personalizado y tierno hecho con mucho cariño y con la ayuda de vuestros hijos? Seguramente, será el mejor regalo que hayáis recibido nunca. Hoy os vamos a enseñar a hacer un DIY de una bolsa de tela de algodón súper exclusiva y personal.
La celebración del Día de la Madre se remonta a la antigüedad ¡hasta en la Antigua Grecia celebraban este día! Es tradición hacerle un obsequio a las madres para demostrarles lo mucho que las queremos o para que nuestros hijos nos demuestren el amor que nos tienen. Pero seguramente, no ...
La celebración del Día de la Madre se remonta a la antigüedad ¡hasta en la Antigua Grecia celebraban este día! Es tradición hacerle un obsequio a las madres para demostrarles lo mucho que las queremos o para que nuestros hijos nos demuestren el amor que nos tienen. Pero seguramente, no hay regalo mejor que el que hacen nuestros niños con sus propias manos. A todas nos encanta la manualidad que traen del colegio ¿no estás de acuerdo? Hoy te queremos proponer un DIY para hacer con ellos: unas bolsas de algodón decoradas con pintura. ¡Seguro que presumirás de tus pequeños siempre que vayas con ella por la calle!
Material para hacer el DIY
· Bolsa de algodón sin estampar
· Pintura no tóxica de diferentes colores
· Esponja
· Pinceles
¿Cómo se hace?
- En primer lugar, plancha la bolsa de algodón para poder dejar la superficie bien lisa y poder pintar con facilidad.
- Pinta las manos de tus hijos con diferentes colores con la pintura no tóxica que has comprado.
- Pídeles que coloquen sus manos pintadas sobre la bolsa de manera circular formando pétalos de flor.
- Pinta la esponja con otro color y aprieta sobre la bolsa en el centro que queda entre todas las huellas.
- Finalmente, ayúdales a pintar un robusto tallo junto con su hoja de color verde con la ayuda de un pincel.
- Déjalo secar durante, por lo menos, 4 horas y ¡se acabó! Ya puedes lucir una bonita (y sobre todo, emotiva) bolsa hecha por tus hijos.
