Los objetivos SMART (o inteligentes) son imprescindibles para cualquier estrategia de negocio. Se trata de una metodología que nos ayuda a conocer cuáles son los elementos indispensables para conseguir un objetivo eficiente y seguro. Así, el acrónimo SMART (specific-específico; mensurable-medible; achievable-alcanzable; relevant-relevante; y timely-temporal), viene a referirse a aquellas metas ...
Los objetivos SMART (o inteligentes) son imprescindibles para cualquier estrategia de negocio. Se trata de una metodología que nos ayuda a conocer cuáles son los elementos indispensables para conseguir un objetivo eficiente y seguro. Así, el acrónimo SMART (specific-específico; mensurable-medible; achievable-alcanzable; relevant-relevante; y timely-temporal), viene a referirse a aquellas metas concretas que podemos cumplir. Además de que los objetivos SMART cuentan con una serie de ventajas, entre ellas:
- Son fáciles de entender.
- Redactar los objetivos nos ayudará como guía durante el proyecto establecido.
- Nos permitirá identificar las metas y asignar tareas y responsabilidades a los miembros del equipo.
- Los objetivos SMART se basan en proponer metas que se puedan cumplir.
Para definir un buen objetivo y que cumpla los requisitos que antes señalábamos es necesario seguir una srie de pasos que enumeramos a continuación. ¡Toma nota!
1. Specific (Específico): el primer punto que debemos tener en cuenta es que el objetivo no tiene que ser ambiguo ni plantear muchas dudas. Por eso tenemos que hacernos una serie de preguntas para aproximarnos todo lo posible a la meta que queremos conseguir. Es decir, plantearnos los posibles obstáculos, lo que queremos conseguir, quién o quiénes formarán parte del equipo para lograr ese objetivo, etc.
2. Measurable (Medible): el objetivo tiene que ser medible, cuantificable y, para ello, debemos hacer un seguimiento del mismo. Esto nos ayudará a conseguir los porpósitos establecidos cuanto antes.
3. Achievable (Alcanzable): no pienses en quimeras, en sueños imposibles. Pon los pies en la tierra y piensa si, realmente, eso que quiere alcanzar es posible, es realista. En caso contrario, nos cundirá el pánico, el desaliento y, lo más probable, es que dejemos esa meta por el camino.
4. Relevant (Relevante): aquí la pregunta más importante que deberías hacerte es "¿por qué quiero lograr ese objetivo?". Solo así te darás cuenta de la relevancia del propósito a conseguir y pondrás todo tu empeño en obtenerlo. Además, tiene que ser un objetivo que esté en consonancia con la estrategia global de la empresa o la nuestra en particular.
5. Time-bound (a tiempo): subráyalo con rotulador rojo. ¡Pon fecha a tu objetivo y cúmplela! Esto es lo más importante de todo (aunque lo hayamos dejado para el último lugar). Debemos controlarnos a nosotros mismos para cumplir los plazos establecidos y llegar a tiempo. Aunque no nos engañemos: es el paso más complicado de todos.
Pero nada es imposible, así que.... ¡a por ello!