Hästens son fabricantes suecos de camas de lujo desde el siglo XIX. Sus exclusivas camas están consideradas las mejores del mundo. No en vano, están fabricadas una a una completamente a mano, por los mejores artesanos y con los mejores materiales naturales. Seguro que las conoces. Su característico estampado a ...
Hästens son fabricantes suecos de camas de lujo desde el siglo XIX. Sus exclusivas camas están consideradas las mejores del mundo. No en vano, están fabricadas una a una completamente a mano, por los mejores artesanos y con los mejores materiales naturales. Seguro que las conoces. Su característico estampado a cuadros azules y blancos las delatan.
En Hästens creen que el sueño es lo que marca la diferencia en la vida. Un proceso natural, difícil de imitar, que nos condiciona nuestro día a día. Si duermes mal, estás cansado, malhumorado y tenso. Pero si has dormido bien, afrontas el día con otras expectativas. Conocedores de su importancia, en Hästens se afanan en crear unas camas con todas las condiciones necesarias para favorecer el buen descanso.
Y ello lo consiguen utilizando sólo materiales naturales. La base de todas las camas Hästens son las crines de caballo. Un material con unas propiedades maravillosas para construir una cama casi perfecta. Cada hebra enrollada de crin de caballo funciona como un pequeño muelle, que ayuda a reforzar el sistema de muelles internos de estos lechos, aportando apoyo y flexibilidad. Además, cada hebra también actúa como un conducto de aire, facilitando la ventilación.
Junto a la crin de caballo, el otro protagonista es el algodón. Otro material natural que aporta suavidad y confort al sueño. Al igual que la lana, perfecta para aportar calor en invierno y frío en verano. Y el lino, el mejor para eliminar la electricidad estática del cuerpo y generar energía positiva durante el sueño.
Todos estos materiales, perfectos para fabricar un colchón único, se rematan con una estructura de cama realizada en pino. Pero no cualquier pino. Sino por unos árboles de esta especie, elegidos cuidadosamente en los bosques del norte de Suecia, donde crecen a un ritmo más lento que les hace más fuertes.
Cada una de las camas, fabricada a mano, está numerada y fabricada a partir de las preferencias y exigencias de sus consumidores. Por eso son tan exclusivas y únicas.
Su historia es la historia de superación de una familia que, generación tras generación, ha aportado su granito de arena para crear la marca en la que se ha convertido hoy en día Hästens. Todo empezó a mediados del siglo XIX con un aprendiz de sillas de montar que, poco a poco, fue virando su negocio hacia los colchones, realizados eso sí, con los mejores crines de caballo. Fue en 1978 cuando desarrolló su emblemático estampado a cuadros. Un estampado que a día de hoy se ha convertido en parte del ADN de la firma, ampliado actualmente a otros colores y a otros productos.
Proveedor oficial de la Casa Real sueca desde sus inicios, a bien seguro, que dormir en una cama de estas características hará que tengas un sueño totalmente reparador, que te hará olvidar el cansancio de las fiestas pasadas.¡ Felices sueños!