Estas curiosas plantas lucen suspendidas en el aire resguardadas en contenedores de cristal o colgadas en la pared en marcos de madera. Pero hay quien las coloca decorando una mesa auxiliar o una principal, eso según se prefiera. A diferencia de otras variedades y, por increíble que parezca, no necesitas ...
Estas curiosas plantas lucen suspendidas en el aire resguardadas en contenedores de cristal o colgadas en la pared en marcos de madera. Pero hay quien las coloca decorando una mesa auxiliar o una principal, eso según se prefiera. A diferencia de otras variedades y, por increíble que parezca, no necesitas tierra para plantarlas y sus raíces se exhiben sin pudor alguno. Las hay de cuatro tipos atendiendo al lugar en el que crecen: epífitas o litófitas, o en cuanto a su color: verdes o grises. Así, las epífitas son aquellas que se sirven de otras plantas o árboles para su crecimiento sin poner en peligro al anfitrión, mientras que las litófitas eligen otros lugares para su desarrollo, como pueden ser rocas o paredes. Por su parte, las verdes se corresponden con aquellas que tienes sus hojas en esa tonalidad y viven en ambientes más húmedos. Las grises, en cambio, poseen tricomas, que son una especie de pelillos casi inapreciables mediante los cuales absorben agua y nutrientes del aire, por lo que pueden desarrollarse en otros ambientes.
Se trata de una familia muy completa, compuesta por más de 600 variedades, entre las que destacan Tillandsia Ionantha, con sus hojas verdes finas y afiladas. Su parte central cambia de color en el momento de la floración para dar paso a una bonita flor de color violeta. O la esplendorosa Tillandsia xerographica de la que se desprenden sus peculiares hojas planas. La forma podría recordarnos un poco a la corona que preside la piña.
Una de las principales ventajas de las plantas aéreas es que apenas requieren cuidados para su conservación. Según Lir, experto de Verdecora, en el caso de esta planta "las raíces no cumplen una función de absorción" y se dice que "viven del aire". A la hora de regar esta variedad hay que tener en cuenta el clima en el que nos encontremos. Si vives en un clima cálido deberás "sumergirla en un jarrón con agua una o dos veces a la semana en verano y sólo una vez cada quince días en invierno". De lo contrario si resides en una zona más fría puedes "alargar el riego" más tiempo. Una vez que la retires del agua procura que escurra toda la humedad antes de meterla en su recipiente decorativo. Otra opción es coger un pulverizador para realizar esta tarea. El profesional advierte que si se detecta que "puntas de las hojas están arrugadas o se están empezando a secar" es conveniente "sumergirlas en agua durante media hora". Las tillandsias como "carecen de sustrato se pueden conservar en cualquier tipo de recipiente", pero sin que el sol les dé directamente.
A la hora de elegir el recipiente para mostrar tu planta aérea existen infinidad de soportes. Quizás los más conocidos son aquellos de cristal con forma de bombilla o pecera, que los hay tanto para colgar como para colocar sobre una superficie. Existen también los colgadores hechos con macramé, pero hay quien, apuesta por instalar su planta en un trozo de corcho, cuenco de madera o de cerámica para exhibirla en un recibidor o en un centro de mesa. Existe la opción de colgarla como si fuese un cuadro, ayudándote de un soporte de madera o esterilla.