¿Alguna vez has pensado que todo el mundo nota que estás con la regla por culpa de su olor? Suele pasar. Muchas mujeres se sienten cohibidas con la menstruación debido a los tabúes y estigmas que muestran la regla como algo sucio, impuro y maloliente. Pero, tal y como explica ...
¿Alguna vez has pensado que todo el mundo nota que estás con la regla por culpa de su olor? Suele pasar. Muchas mujeres se sienten cohibidas con la menstruación debido a los tabúes y estigmas que muestran la regla como algo sucio, impuro y maloliente. Pero, tal y como explica Intimima en un artículo, la regla no huele mal si guardas unas medidas higiénicas correctas y evitas usar determinados productos.
El ciclo menstrual, recuerda la marca especializada en higiene íntima, "es un proceso biológico que prepara mensualmente el sistema reproductor femenino para un posible embarazo y para eliminar el endometrio (capa que recubre el interior del útero) cuando no se ha producido la fecundación. Por lo tanto, en contra de lo que se piensa habitualmente, la regla no es solo sangre, sino un fluido compuesto por esta, restos del endometrio, moco cervical y flujo vaginal".
El olor característico del flujo menstrual es metálico (debido al hierro presente en la sangre), dulzón y ácido (por la composición única del pH vaginal y su acidez); nada desagradable, como puedes comprobar por ti misma si usas copa menstrual y hueles su contenido antes de desecharlo por el inodoro.
Asimismo, los demás ni siquiera tienen por qué notarlo, aunque si usas compresas y tampones, cuanto más tiempo pases con ellas, más probabilidades hay de que los microorganismos y el calor acentúen el olor del flujo menstrual, especialmente en verano.
Los productos menstruales con perfume no son lo más recomendable, dado que pueden causar afecciones como la dermatitis irritativa de contacto y la vaginitis alérgica. Por contra, la manera más saludable para reducir el olor menstrual es seguir estos consejos de higiene íntima que facilita Intimima.
En primer lugar, lávate la vulva al menos una vez al día con agua tibia. Evita el agua fría (ya que puede provocarte dolor menstrual), los baños con agua muy caliente (puede causarte vaginitis irritativa) y las duchas vaginales (alteran el pH de tu vagina). Recuerda usar jabones específicos para la zona íntima femenina y si no dispones de ellos, utiliza simplemente agua cada vez que vayas al servicio.
Usa ropa interior de algodón, que impide la acumulación de humedad y olores fuertes. Asimismo, evita los pantalones que te opriman la vulva y las telas sintéticas. "Este tipo de ropa aumenta la humedad y el calor en tu zona íntima, favoreciendo el crecimiento de bacterias, hongos, mal olor e irritación", señala la marca.
Igualmente, sustituye tu compresa o tampón por uno limpio máximo cada cuatro horas. Mejor aún: utiliza una copa menstrual. La web Medical News Today, especializada en noticias de medicina, recomienda cambiar las compresas y tampones por copas menstruales para prevenir las infecciones y el mal olor, ya que se usan en el interior de la vagina y contienen la regla en vez de absorberla, evitando las microerosiones en las paredes vaginales y la alteración del pH vaginal. Pero no elijas cualquiera, sino las de silicona médica, ya que son biocompatibles.
¿Cuándo preocuparse por el olor de tu regla? Cuando es intenso, penetrante, similar a pescado podrido, y su color amarillento o anaranjado. Si además sientes picores vaginales, es muy probable que estés sufriendo una infección. Por eso, acude al médico para que te examine y prescriba el tratamiento adecuado para que no avance y se agrave.