Cada vez son más las personas que se apuntan a quedarse en casa en vacaciones. A esta actitud se le ha puesto nombre: staycation. Es una combinación entre las palabras inglesas: stay (quedarse) y vacation (vacaciones). Sea cual sea su nombre, consiste en tomar la decisión de viajar en cualquier ...
Cada vez son más las personas que se apuntan a quedarse en casa en vacaciones. A esta actitud se le ha puesto nombre: staycation. Es una combinación entre las palabras inglesas: stay (quedarse) y vacation (vacaciones). Sea cual sea su nombre, consiste en tomar la decisión de viajar en cualquier otra época del año y aprovechar el verano para permanecer en casa haciendo planes diferentes o, simplemente, descansando, pues en eso consisten las vacaciones: en vivir una experiencia gratificante.
En este sentido, las nuevas vacaciones de verano consisten en no hacer planes y dejarse ir. Podrás dedicar el día a no hacer nada, a salir a la calle y no volver hasta la noche, a hacer una escapada a una localidad cercana, a comer de picnic, a acudir a algún evento gratuito al aire libre o a alguna de las fiestas callejeras que se celebran en verano.
Entre las ideas para disfrutar tus vacaciones en casa, destacarían:
1-Acudir a algún restaurante que durante el resto del año está lleno y precisa reserva con varios meses de antelación.
2-Conocer tu ciudad. Hacer una excursión por la ciudad en la que vives puede ser un buen plan para realizar sola o con la familia. Es frecuente que nos dediquemos a visitar los museos y catedrales de las ciudades que visitamos cuando viajamos y no lo hagamos con los monumentos que tenemos en nuestra ciudad. Puedes redescubrir la ciudad en la que vives paseando por los barrios menos habituales para conocer su historia y la vida cotidiana de sus habitantes.
3-Disfrutar de los amigos sin pensar en el tiempo o las responsabilidades.
4-Evitar realizar tareas domésticas pendientes. Salvo que las veas como algo gratificante, no es el momento de hacerlas.
5-Hacer excursiones por lugares que no aparecen en las guías. Subir a un autobús y viajar hasta el final del trayecto para conocer zonas de la ciudad que no están en tu recorrido habitual, como antiguas fábricas actualmente en desuso.
6-Leer los libros que has tenido que aparcar por falta de tiempo.
7-Pasar días de completo relax. Olvida todas las pantallas y desconecta del teléfono móvil que se ha convertido en una prolongación de tu mano. Evita mirar el correo electrónico para disfrutar de unas verdaderas vacaciones mentales.
8-Realizar una actividad cultural. Ir al cine, al teatro o a un musical sin sentir que está abarrotado.
9-Reducir tus preocupaciones. La falta de tiempo genera estrés. Ha llegado el momento de pensar únicamente en cosas banales y no mirar el reloj.