La intolerancia a la incertidumbre se describe como una reacción compleja pues incluye al menos tres componentes (cognitivo, afectivo y conductual). Genera importantes sesgos en el procesamiento de la información que provocan una valoración equivocada en el sentido de considerar muy amenazantes a una gran variedad de estímulos o situaciones ...
La intolerancia a la incertidumbre se describe como una reacción compleja pues incluye al menos tres componentes (cognitivo, afectivo y conductual). Genera importantes sesgos en el procesamiento de la información que provocan una valoración equivocada en el sentido de considerar muy amenazantes a una gran variedad de estímulos o situaciones que realmente no lo son. Además, inhibe la capacidad de poner en marcha recursos y capacidades de afrontamiento adaptativas.
Los especialistas la relacionan con una amplia gama de trastornos internalizantes, se considera que tiene valor transdiagnóstico y sería un factor de mantenimiento en los trastornos de ansiedad y depresión. Es una creencia inadecuada que se presenta en personas que sufren hipocondría, trastorno de pánico o trastorno obsesivo compulsivo, por ejemplo.
En las personas que padecen diferentes trastornos de ansiedad, cualquier cuestión que genere dudas o que no proporcione una seguridad absoluta provoca una exacerbación de los síntomas, especialmente si el tema sobre el que se tienen dudas es importante para la persona (como la salud, por ejemplo).
El médico debe realizar un diagnóstico correcto para poder pautar el tratamiento adecuado. Debido a que la atención está muy centrada en el futuro, es preciso potenciar la atención o conciencia plena porque son las habilidades que ayudan a aceptar la incertidumbre.
Los especialistas señalan que, para reducir la intolerancia a la incertidumbre, sería recomendable:
1-Identificar cuando se siente la necesidad de certeza y el deseo de utilizar la preocupación para lograrlo. Darse cuenta de que pensar que es terrible o insoportable no saber algo es inadecuado y genera una sensación de inquietud y nervios debido a que no se sabe lo que va a ocurrir. Además, incapacita para tomar una decisión porque se tiene la necesidad de estar primero seguro del resultado.
2-Elegir activamente no reaccionar a esa necesidad de certeza, previsibilidad o seguridad de forma automática. No responder a esa necesidad que genera preocupación.
3-Aceptar la incertidumbre. La necesidad de certidumbre es innecesaria porque la incertidumbre es parte de la vida.
4-Centrarse plenamente en el presente en lugar de centrarse en el futuro. Estar presente y consciente en el momento actual fijando ahí la atención. Estar más presente y consciente puede ayudar a aceptar la incertidumbre. Si te concentras en el presente y no en el futuro, es menos probable que te moleste la incertidumbre que sientes sobre el futuro.
Cada vez que la mente pretenda volver a tener certeza y control en la vida, intenta aplicar las recomendaciones. Esta indicación te ayudará a manejar las tendencias a la certeza que se presentan en la mente de manera automática.