Con la llegada del verano, las personas suelen experimentar un cambio de ánimo positivo. Esta estación trae consigo más horas de luz, temperaturas agradables, vacaciones a la vista y más tiempo para socializar: los ingredientes perfectos para disfrutar, desconectar y, sobre todo, sonreír. Por este motivo, el periodo estival se ...
Con la llegada del verano, las personas suelen experimentar un cambio de ánimo positivo. Esta estación trae consigo más horas de luz, temperaturas agradables, vacaciones a la vista y más tiempo para socializar: los ingredientes perfectos para disfrutar, desconectar y, sobre todo, sonreír. Por este motivo, el periodo estival se presenta como una gran oportunidad para recordar la importancia de cuidar nuestra sonrisa y rodearnos de todo aquello que nos aporta bienestar, como la salud, la música y la buena compañía.
Y es que a menudo olvidamos que la salud bucodental está estrechamente ligada al bienestar general, no solo desde un punto de vista físico, sino también emocional y social. Sobre esto, Miriam Alexandre, coordinadora médica del área de Prostodoncia, Estética y Odontología General del Grupo Vitaldent, comenta que "tener una boca sana no solo mejora funciones esenciales como la masticación, la fonación o la respiración, sino que refuerza la seguridad personal, mejora la comunicación con los demás y favorece nuestra autoestima".
De hecho, según estudios recientes, el 85% de las personas cree que una sonrisa cuidada mejora su imagen personal, y el 72% afirma sentirse más seguro de sí mismo cuando puede sonreír sin complejos. "Cuando alguien no se siente a gusto con su sonrisa, tiende a ocultarla. Y lo que quizá muchos pacientes no saben es que ese gesto aparentemente pequeño puede afectar más de lo que imaginan. Puede limitar la vida social, influir en el entorno laboral y debilitar la confianza personal", añade la experta de Vitaldent.
Además, se ha evidenciado que la sonrisa tiene un efecto directo sobre el organismo; incluso cuando sonreímos de forma voluntaria. Lo anterior puede ayudar a reducir el estrés, bajar la frecuencia cardíaca y mejorar el estado de ánimo. El simple hecho de esbozar una sonrisa (aunque no nazca espontáneamente) puede tener efectos positivos sobre la salud mental.
Y si hablamos de emociones y bienestar, la música también juega un papel fundamental. Escuchar canciones que nos gustan activa el sistema de recompensa del cerebro y estimula la liberación de dopamina, el neurotransmisor asociado al placer, la motivación y la conexión emocional. No es casualidad que, al escuchar una melodía familiar o significativa, aparezca una sonrisa en nuestro rostro sin ser conscientes.
De hecho, si combinamos estos dos elementos (una sonrisa saludable y la música adecuada), podemos crear un pequeño ritual diario de bienestar. Cuidar la boca, cantar en la ducha, reír en buena compañía o disfrutar de una canción en el coche son gestos cotidianos que mejoran el ánimo y nos conectan con los demás.
"A veces no somos conscientes del impacto que tiene una sonrisa saludable en nuestra calidad de vida. En consulta no solo tratamos dientes, tratamos personas. Y lo que vemos a diario es que, cuando alguien recupera su sonrisa, también recupera las ganas de reír, la seguridad en sí mismo y las relaciones con los demás. Para nosotros, esta transformación interior es tan valiosa como cualquier mejora estética y funcional", culmina la doctora Alexandre.
Con el fin de fomentar el cuidado de la salud bucodental también durante esta estación del año, la especialista ofrece las siguientes recomendaciones:
Por último, nos comparte algunos datos curiosos que no son tan conocidos por la población general y que pueden tener efectos en nuestra salud oral si no se tienen en cuenta: