El bienestar animal no solo depende de una buena alimentación o atención veterinaria. La estimulación mental, la actividad física y el afecto son igual de importantes para su salud emocional. Como explica Eva Sánchez‑Paniagua, veterinaria de Clinicanimal, la red veterinaria de Tiendanimal: "Los perros son animales sociales que necesitan sentirse ...
El bienestar animal no solo depende de una buena alimentación o atención veterinaria. La estimulación mental, la actividad física y el afecto son igual de importantes para su salud emocional. Como explica Eva Sánchez‑Paniagua, veterinaria de Clinicanimal, la red veterinaria de Tiendanimal: "Los perros son animales sociales que necesitan sentirse parte del entorno familiar. Dedicarles tiempo, sobre todo de calidad, impacta directamente en su felicidad, en la reducción del estrés y en su comportamiento general. Y, por supuesto, también mejora nuestro propio bienestar".
1. Picnic en la sombra (con todos los sentidos activados)
Organizar un picnic en un parque o bosque con sombra no solo es una oportunidad para compartir una comida al aire libre, sino también para ofrecer un paseo olfativo más enriquecedor. Puedes llevar su manta favorita, snacks naturales, juguetes interactivos y agua fresca. Además, un entorno nuevo ofrece estímulos positivos que favorecen la salud mental del animal.
2. Baño en playa o río habilitado para animales
Muchas zonas de costa en España ya cuentan con playas caninas señalizadas, así como tramos de río o embalses acondicionados. El agua no solo ayuda a regular la temperatura corporal, tambiénfavorece el ejercicio sin sobrecargar las articulaciones. Además, nadar puede ser una gran fuente de diversión y liberación de energía siempre que el animal se sienta cómodo en el agua. Y para reforzar esta experiencia, una piscina portátil antideslizante es perfecta para la terraza o el campo.
3. Ruta de senderismo con paradas refrescantes
Si tu compañero es activo y está acostumbrado al ejercicio, una excursión por la montaña o senderos naturales puede ser un plan excelente. Introduce descansos a la sombra, lleva un bebedero portátil, y si es posible, elige rutas con puntos de agua donde pueda refrescarse. Caminar juntos en la naturaleza fortalece el vínculo y reduce el estrés de ambos.
4. Tarde de juegos acuáticos en casa
Para quienes prefieren quedarse en casa, montar una zona de juegos con piscina portátil o juguetes flotantes en la terraza o jardín es una gran alternativa. Puedes esconder premios en juguetes refrescantes o simplemente jugar a salpicar con seguridad. El juego libre en ambientes controlados estimula su mente, promueve el vínculo y permite expresar comportamientos naturales de forma saludable. Por ejemplo, un juguete flotante convertirá los juegos en casa en una aventura acuática segura y divertida.
5. Sesión de fotos veraniega
Organiza una pequeña sesión de fotos temática con accesorios veraniegos (pañuelos, gafas, juguetes coloridos) en casa, en el parque o durante una salida. No solo tendrás recuerdos bonitos, también es una forma divertida de pasar tiempo juntos.
6. Spa canino en casa
Muchos perros disfrutan de una sesión de baño relajante si se realiza con calma, agua templada y masajes suaves. Puedes usar productos naturales adaptados a su piel, realizar un cepillado consciente y terminar con un rato de caricias o musicoterapia. Estas rutinas reducen el estrés, fortalecen la confianza y refuerzan el cuidado del cuerpo.
7. Juegos de olfato y búsqueda en la naturaleza
Esconde pequeñas golosinas o juguetes en diferentes puntos del jardín o en un parque con hierba alta. Activar el olfato es una de las formas más completas de estimulación mental para los perros. Además, este tipo de juegos mejora la concentración, el autocontrol y canaliza la energía de forma positiva.
8. Helados caseros y meriendas saludables
Puedes preparar helados naturales con ingredientes seguros como yogur sin azúcar, frutas aptas (como sandía o manzana) y caldo de pollo sin sal, siempre asegurándote de que no contengan ingredientes tóxicos (cebolla, ajo). Servir estas meriendas en juguetes rellenables puede convertir un simple tentempié en una experiencia refrescante y divertida. Y si además los sirves en un bebedero portátil o usas mordedor frío, combinarás frescor, hidratación y estimulación en uno.
9. Siesta compartida bajo el ventilador
En los días más calurosos, simplemente compartir una siesta en una zona fresca, tumbados uno al lado del otro, puede ser un acto de conexión profunda. El contacto cercano y tranquilo genera oxitocina, la hormona del apego, en ambos.
10. Mini escapada de fin de semana
Aprovecha el verano para una pequeña escapada a un entorno rural o costero donde admitan animales. Cambiar de entorno, explorar nuevos olores y pasar tiempo sin prisas contribuye a su bienestar emocional. Asegúrate de llevar todo lo necesario para su comodidad y seguridad, ¡y de que siempre esté protegido frente a cualquier parásito!
Todos estos planes tienen algo en común: el valor del tiempo compartido. Los perros no recuerdan los objetos, sino las experiencias. Y los beneficios de estos momentos van en ambas direcciones: compartir tiempo con un animal reduce la ansiedad, mejora el estado de ánimo y promueve hábitos más activos en las personas.
"Una actividad conjunta que implique movimiento, atención y juego no solo mantiene al perro estimulado y feliz. También mejora el vínculo emocional con su responsable, refuerza la comunicación no verbal y potencia la confianza mutua", subraya Eva Sánchez‑Paniagua. "Es importante recordar que, mientras muchos podemos disfrutar de estos planes, otros perros padecen abandono y no tienen acceso a estas experiencias; este día también puede servir para visibilizar la urgencia de adoptar y proteger a quienes no tienen un hogar", recuerda Sánchez-Paniagua.