Cómo volver a la rutina sin agobios

Sonia Baños

Septiembre tiene algo de enero: arrastra listas, propósitos, agendas nuevas… y, muchas veces, más presión de la que nos gustaría. Después del paréntesis del verano, volver a la rutina puede sentirse como un choque frontal. Pero no tiene por qué ser así. En esvivir.com te proponemos mirar este inicio de curso desde otro lugar: uno más amable, más flexible y más centrado en lo que necesitas tú, no en lo que se espera de ti.

05/09/2025

No lo hagas todo a la vez Uno de los mayores errores que cometemos es querer recuperar todo de golpe: horarios, ejercicio, organización, casa, trabajo, alimentación perfecta, redes ordenadas, armarios a punto… Es demasiado. El cuerpo aún está medio en agosto y la mente quiere correr. Respira. No hace falta volver ...

No lo hagas todo a la vez

Uno de los mayores errores que cometemos es querer recuperar todo de golpe: horarios, ejercicio, organización, casa, trabajo, alimentación perfecta, redes ordenadas, armarios a punto… Es demasiado. El cuerpo aún está medio en agosto y la mente quiere correr. Respira. No hace falta volver con todo encajado el día 1.

Puedes empezar por:

  • Establecer una sola rutina diaria que te haga bien (una comida a hora fija, una hora sin pantallas, una caminata).
  • Aceptar que el desorden temporal es parte de la transición.
  • Dejar espacios vacíos en la agenda: no todo tiene que estar programado.
     

Recuperar el ritmo es un proceso, no una obligación inmediata.

Haz limpieza emocional (además de armarios)

El cambio de estación también puede ser un buen momento para revisar qué estás arrastrando. ¿Hay compromisos que ya no te motivan? ¿Personas que te quitan energía? ¿Tareas que podrías delegar?

Una buena forma de empezar septiembre con más calma:

  • Repasa tu lista de "debería" y táchalos sin culpa.
  • Organiza tu espacio de trabajo y elimina lo que no necesitas.
  • Crea un pequeño ritual de cierre del verano: escribir, ordenar fotos, hacer una lista de lo que sí funcionó.
     

Cerrar ciclos ayuda a empezar con más ligereza.

Suma cosas que te hagan ilusión

La vuelta no tiene por qué ser solo obligaciones. A veces, basta con tener algo pequeño que te motive para cambiar el enfoque. No necesitas un gran viaje ni un nuevo proyecto. Tal vez es:

  • Volver a tu café favorito.
  • Comprar un cuaderno bonito.
  • Apuntarte a una clase por puro placer.
  • Empezar un hobby sin presiones.
     

No todo tiene que ser productivo. A veces, lo que más ayuda a sostener la rutina es aquello que simplemente te hace sentir bien.

Vuelve a lo cotidiano con presencia

No hace falta reinventarte. A veces, solo necesitas volver con más intención. Poner música mientras cocinas, caminar sin prisa, mirar el cielo un rato, desayunar sentada. Lo pequeño también sostiene.

Y si te ayuda, recuerda que:

  • Estás volviendo, no empezando de cero.
  • No tienes que recuperar "el control" de inmediato.
  • Puedes construir una rutina nueva a tu medida.
     

Septiembre también puede ser suave

No dejes que el estrés ajeno marque tu ritmo. Tú decides cómo quieres volver. Si puedes darte tregua, si puedes bajar la exigencia, si puedes priorizar el cuidado… septiembre puede convertirse en un nuevo comienzo, sí, pero uno a tu ritmo. Más real. Más tuyo. Más en paz.

 

El aguacate en la menopausia: beneficios, recetas y cómo incorporarlo a la dieta
La maternidad sin estatus: por qué nuestra cultura no reconoce a las madres
Reto 30 días para transformar tu vida sin azúcar y sin redes sociales

Cookie Consent

This website uses cookies or similar technologies, to enhance your browsing experience and provide personalized recommendations. By continuing to use our website, you agree to our Privacy Policy