Cómo dejar de utilizar como excusa "cuando tenga tiempo"

Sonia Baños

¿Cuántas veces te has dicho: "cuando tenga tiempo me apunto a yoga", "cuando tenga tiempo leeré ese libro", "cuando tenga tiempo me dedicaré a esa idea que me ilusiona"? Parece lógico, incluso práctico. Pero ese "cuando" nunca se convierte en "ahora". El tiempo pasa, los días se llenan de compromisos, y lo que querías para ti sigue en pausa. En esvivir.com queremos ayudarte a identificar por qué ocurre y cómo salir de esta trampa tan común entre mujeres.

08/09/2025

No es falta de tiempo, es falta de permiso Detrás de cada "no tengo tiempo" suele esconderse otra frase más honesta: "no me lo permito". No me permito priorizarme, descansar sin culpa o disfrutar sin tener todo lo demás hecho. Crecemos con la idea de que el placer o los proyectos ...

No es falta de tiempo, es falta de permiso

Detrás de cada "no tengo tiempo" suele esconderse otra frase más honesta: "no me lo permito". No me permito priorizarme, descansar sin culpa o disfrutar sin tener todo lo demás hecho. Crecemos con la idea de que el placer o los proyectos personales deben ganarse a base de esfuerzo. Como si estar ocupadas fuera sinónimo de valía. El resultado: el cuerpo se agota, la creatividad se posterga y el deseo queda siempre relegado.

El "cuando tenga tiempo" como refugio

Este autoengaño también cumple una función. Aplazar lo que queremos puede parecer una excusa, pero a menudo es una protección:

  • Si no empiezo, no puedo fracasar.
  • Si lo dejo para más adelante, mantengo la ilusión intacta.
  • Si espero a que todo esté perfecto, evito enfrentar mis miedos.
     

El problema es que ese refugio cómodo se transforma en un círculo vicioso. Y lo que empieza siendo un "ya lo haré" se convierte en frustración o apatía.

Preguntas que pueden ayudarte a romper el patrón

Antes de pensar en reorganizar tu agenda, conviene revisar las creencias que alimentan este hábito. Pregúntate:

  • ¿De verdad no tengo tiempo o siento que no lo merezco?
  • ¿Qué pongo siempre por delante de mí?
  • ¿Qué mensajes me repito para no darme permiso?
     

Estas reflexiones suelen revelar que lo que falta no es hueco en el calendario, sino valentía para ponerte en el centro.

Del "cuando" al "hoy"

No necesitas una tarde entera para empezar. A veces, lo transformador es un gesto pequeño:

  • Escribir un párrafo en lugar de esperar a "tener horas".
  • Ir a una primera clase sin comprometerte a todo un curso.
  • Tomarte cinco minutos de respiro aunque la casa no esté impecable.
     

El tiempo no se encuentra, se elige. Y cuando eliges dedicarte aunque sea un instante, estás enviando un mensaje poderoso: hoy no me dejo para después.

Lo que sí puede esperar (y lo que no)

Las listas infinitas de tareas siempre estarán ahí. Pero tu deseo, tu descanso y tu versión más libre no deberían quedarse al final. No se trata de hacerlo todo, sino de empezar a hacer lo que de verdad importa. No mañana, no cuando todo esté perfecto, sino ahora, aunque sea en pequeñas dosis.

Porque cada minuto que te concedes sin culpa es una manera de recordarte que mereces existir también para ti. Y ese permiso interno es, al final, el verdadero cambio.

 

El aguacate en la menopausia: beneficios, recetas y cómo incorporarlo a la dieta
La maternidad sin estatus: por qué nuestra cultura no reconoce a las madres
Reto 30 días para transformar tu vida sin azúcar y sin redes sociales

Cookie Consent

This website uses cookies or similar technologies, to enhance your browsing experience and provide personalized recommendations. By continuing to use our website, you agree to our Privacy Policy