Su fundador, el perfumista autodidacta Richard Saint-Ford, conocido como El Perfumista Hereje, ha construido un universo donde la intuición, la emoción y el bagaje multicultural sustituyen a la rigidez académica. El origen de una visión única La pasión de Saint-Ford por las fragancias nació en su infancia, guiado por su abuela, también ...
Su fundador, el perfumista autodidacta Richard Saint-Ford, conocido como El Perfumista Hereje, ha construido un universo donde la intuición, la emoción y el bagaje multicultural sustituyen a la rigidez académica.
La pasión de Saint-Ford por las fragancias nació en su infancia, guiado por su abuela, también perfumista naturalista. Creció entre Inglaterra, Barbados, España y California, absorbiendo influencias culturales y paisajísticas que hoy se transforman en aromas cargados de simbolismo y escapismo. Con casi dos décadas de experiencia en moda y belleza, colaborando con casas como Gucci, Tom Ford y Diesel, decidió fundar IGGYWOO como un espacio de autoexpresión libre de normas, donde cada perfume se inspira en colores, paisajes y emociones antes de elegir ingredientes.

El enfoque creativo de IGGYWOO se aleja de los cánones tradicionales. Sus composiciones reflejan el mestizaje cultural de su fundador e incorporan ingredientes autóctonos de los lugares que ha habitado o explorado. Cada fragancia se convierte así en una narrativa personal y multicultural.
Las fórmulas son veganas, cruelty free, de origen ético y natural, libres de más de 1.300 alérgenos y de ingredientes controvertidos como parabenos, ftalatos o hidroquinona. Además, la firma apuesta por subproductos botánicos y prácticas sostenibles, reforzando su compromiso con el planeta.
El icónico tapón de los perfumes IGGYWOO, inspirado en una flor en plena floración, es un símbolo de pureza y elegancia. Su diseño escultórico sirve como lienzo para una narrativa visual vibrante y poco convencional, reforzada por la dirección creativa del propio Saint-Ford.
Cada creación de la marca encarna un universo propio:
Cashmere Show Pony: un escapismo suave y aterciopelado con almizcles blancos, azúcar de vainilla, coco y cashmeran, inspirado en Barbados.
Love Extreme: cálido y especiado, mezcla de patchouli, cereza, violeta, rosa y ámbar para expresar la intensidad del amor.
Night Narcotic: magnético y adictivo, combina cítricos, tabaco, jazmín nocturno y cedro de Texas, evocando la vida nocturna más hedonista.
Bohemian Water: una oda a California, con bergamota, flor de neroli, hinojo marino y ciprés azul, fresca y oceánica.
Fantasma Overglow: cítrico y ahumado, une oud real indio, bergamota, pomelo y ámbar en un contraste de luz y sombra.
Flower Boy: ambarada y floral, con rosa, jazmín de Arabia, heliotropo y madera de agar, explora la dualidad entre lo audaz y lo delicado.
Pistachio Voodoo Child: gourmand floral, combina pistacho, lirio vudú, jazmín y leche de vainilla para un aroma inesperado y envolvente.
Más que una marca, IGGYWOO es un movimiento que celebra la diversidad cultural, la autoexpresión y el arte como vehículo de unión. Con cada fragancia, la firma invita a traspasar fronteras de género, edad o identidad, creando un lenguaje universal basado en el poder del perfume.
Desde Londres y Los Ángeles, la marca se posiciona como un referente en perfumería contemporánea, con un compromiso inquebrantable con la transparencia, la artesanía y la sostenibilidad. Cada fragancia es una experiencia transformadora que busca despertar los sentidos y llevar al usuario más allá de lo visible.