Cuando acudimos a un centro de exposiciones lo hacemos atraídos por el artista, la obra expuesta o porque sentimos la curiosidad de descubrir a nuevos creadores o disciplinas artísticas que todavía no conocemos. A veces, aunque vayamos con una opinión preconcebida de lo que nos vamos a encontrar en la ...
Cuando acudimos a un centro de exposiciones lo hacemos atraídos por el artista, la obra expuesta o porque sentimos la curiosidad de descubrir a nuevos creadores o disciplinas artísticas que todavía no conocemos. A veces, aunque vayamos con una opinión preconcebida de lo que nos vamos a encontrar en la visita, puede que nos sorprendamos con lo que averigüemos sobre la trayectoria o el proceso creativo al que ha sido sometido un cuadro, una escultura o una obra de arte. Y es que acudir a un espacio de este tipo nos permite precisamente eso, dejarnos llevar por lo expuesto y contemplarlo con una visión 360º que no solo se limita a lo que aparece en el lienzo o en el módulo expositivo, sino que se desgrana y disecciona mentalmente para obtener una panorámica más completa, que se enriquece además por descripción que acompaña cada una de las piezas. En 'Desenfocado. Otra visión del arte', que estará disponible hasta el 12 de abril de 2026 en CaixaForum Madrid, lo que se pide es que el observador no se quede admirando la obra sin más. Debe estar preparado para profundizar en cada capa de la obra y buscarle el sentido.
Esta muestra surge de la colaboración entre el Musée d'Orsay, el Musée de l'Orangerie y la Fundación 'la Caixa'. En ella están representadas 72 proyectos artísticos de más de 50 artistas que utilizan "una amplia variedad de técnicas y formatos de pintura, obra gráfica, escultura, fotografía y vídeo", informan en la página web de Fundación 'la Caixa'. Está divida en cinco bloques temáticos, que se corresponden con: el 'Preámbulo', el punto de partida es un cuadro del pintor Monet dedicado a los nenúfares, donde se ve un estanque y un puente cuyas pinceladas han sido difuminadas, desenfocadas, como si al intentar captar este paisaje este estuviese en movimiento. En la siguiente se profundiza en el arte del desenfoque a través de 'Las fronteras de lo visible', de modo que "los artistas juegan con la vaguedad más que con la oposición entre representación y no representación", señalan desde la web del evento. Por su parte, 'La erosión de las certezas' se centra en mostrar "lo borroso… en un mundo donde la inestabilidad prevalece y la visibilidad se nubla", aseguran. En cambio, en 'Elogio de la indefinición' se trata de encontrar en "lo difuso una búsqueda de identidad". Por último, a través de 'Futuros inciertos' se percibe "lo borroso" como una sensación de "inestabilidad, pero que también tiene su encanto", comunican.
En algunas ocasiones, cuando fotografiamos en sujeto, animal u objeto en movimiento somos capaces de plasmar en una fotografía ese instante en el que se produce un cambio, pasando de un estado de reposo a la acción. Otras veces, si pulsamos el botón de la cámara demasiado rápido, la imagen podría salir desenfocada, por no haber dado tiempo a conseguir el punto exacto de nitidez. Sin embargo, esta fotografía no debería descartarse, ya que también consigue enmarcar una belleza propia, que va más allá de las normas preestablecidas, de lo correcto y se deja llevar por lo espontáneo y lo creativo. Como se indica en la web de la exposición: "esta necesidad de estructurar la realidad comporta el riesgo de limitar su sentido. El desenfoque, en cambio, se alimenta de nuestra experiencia, que se desarrolla en el tiempo y alcanza nuestro interior más profundo. Los artistas utilizan este efecto para cuestionar nuestros modos de percepción, invitarnos a regresar a la fuente misma de la mirada y animarnos a dejar atrás la lectura unívoca de la realidad". Esta técnica les sirve a los creadores como mecanismo para "desdibujar una realidad que la mirada no puede soportar", para recrear aquellos "lugares más íntimos, difíciles de narrar", como una manera de "dar respuesta a las incertidumbres contemporáneas", que se nos escapan de toda certeza o de las rutinas habituales a las que estamos acostumbrados, o ser vista como "una nueva motivación y reinvención", detallan.
Además de todas estas secciones, 'Desenfocado. Otra visión del arte' contiene un lugar específico para la "meditación y contemplación" titulado 'Re-ver. Mirar el cielo con ojos diversos', donde el espectador se tumba para admirar el cielo y sus nubes a través de una nueva forma de mirar, con "unas gafas intervenidas artísticamente que distorsionan la visión", explican. La peculiaridad de este cielo es que "ha sido creado con IA generativa y las gafas permitirán ver el cielo de diferentes formas: con otros colores, con luz irisada o con una lente que enfoque más de cerca o más de lejos, o más difuminado", explican.
Entre las obras expuestas se encuentra la de la artista y fotógrafa francesa, Mame-Diarra Niang, que en 'Morphologie du rêve #6', exhibe un proyecto realizado en el confinamiento, que surgió después de fotografiar la pantalla de su televisor "una y otra vez, de forma que cada nueva toma desdibuja aún más los contornos, hasta transformar los cuerpos en manchas de color", comparten en la web de Fundación 'la Caixa'. En la exposición hay también una llamada de atención a la emergencia climática, de la mano de Léa Belooussovitch y su obra 'Sequoia National Forest, Californie, États-Unis'. La artista realiza "dibujos con lápices de colores sobre fieltro de lana a partir de imágenes mediáticas". Así, en su serie 'Brasiers' el motivo de su proyecto son los "megaincendios que han arrasado el planeta desde 2026". Para centrar el foco en este acontecimiento, Belooussovitch recurre a las "composiciones casi abstractas", informan.
FOTO PRINCIPAL.: Imagen de la exposición 'Desenfocado. Otra visión del arte' en CaixForum Madrid extraída del perfil de CaixaForum en la red social 'X'.