Aunque cada vez es más recurrente ver productos de cosmética basados en ingredientes de origen natural, las civilizaciones más antiguas ya conocían las propiedades de los ingredientes extraídos de la naturaleza. De hecho, es la base sobre la que se ha erguido la cosmética como la entendemos hoy en día. Una buena definición de cosmética natural es la que engloba aquellos productos que utilizan materias primas de origen natural, que han pasado por un proceso con la mínima intervención de aditivos o transformaciones químicas, y que han utilizado únicamente aquellos procesos que no son perjudiciales para el medio ambiente y la salud de las personas.

Hay gran variedad de ingredientes de origen natural que, por sus propiedades tan beneficiosas, se usan como base de los productos cosméticos. Sin embargo, las estrellas indiscutibles de la cosmética natural son el aloe vera, el aceite de macadamia, la manteca de karité, la rosa mosqueta y el aceite de argán. La cosmética natural y vegana, asimismo, es una tendencia que ha venido para quedarse.

Aloe Vera

Esta planta, que habita principalmente en zonas desérticas o semidesérticas, es una de las más utilizadas en cosmética por su alto contenido en aminoácidos, minerales, vitaminas y enzimas. Su gel natural actúa como un remedio cutáneo, creando un manto protector y refrescante. Más de un 95 % del aloe vera es agua, y contiene más de 200 nutrientes esenciales para el organismo.

Aceite de macadamia

Obtenido del prensado en frío de la grava de la nuez de macadamia, este aceite contiene gran cantidad de ácidos oleicos, linoleicos, antioxidantes y esteroles, que proporcionan una gran nutrición a la piel. Es un ingrediente natural muy potente para el cabello, y es ideal para regenerar las puntas abiertas, fortalecerlo y evitar su caída.

Manteca de karité

Esta manteca procede del árbol karité o Vitellaria paradoxa, propio de la sabana africana (Karité significa "árbol de la mantequilla"). Esta manteca natural tiene un gran poder regenerativo, así como propiedades para ganar flexibilidad y suavidad. Posee vitaminas A, D, E y F, y su uso más habitual es para el tratamiento de pieles secas.

Aceite de Rosa mosqueta

Como su nombre indica, es un aceite vegetal que se extrae directamente de las semillas de un arbusto de la familia de las rosas. Es uno de los productos que han revolucionado el mundo de la cosmética por sus propiedades cicatrizantes, buscadas sobre todo para combatir las estrías o las marcas después de las operaciones. Además, aporta grandes beneficios para el cabello y el organismo, ya que contiene propiedades hidratantes, reafirmantes y reparadoras.

Aceite de argán

Conocido como `oro líquido´, este aceite lo fabricaban tradicionalmente los bereberes del norte de África de forma manual. Se obtiene a través del prensado de los frutos del árbol original, y contiene ácidos grasos esenciales y tocoferoles antioxidantes. Hace de potente hidratante para la piel y el cabello, y es considerado un gran producto antienvejecimiento.

Son muchas las marcas de cosméticos que han incluido estos ingredientes naturales a sus productos. A parte de comprar directamente los productos en los establecimientos o en sus plataformas digitales, otra opción es crear tus propios cosméticos caseros.