La carne roja y las enfermedades cardiovasculares están relacionadas. Se calcula que ingerir dos porciones de este tipo de alimento a la semana, ya sea carne roja, procesada o aves de corral, aumenta entre un 3% y un 7% la posibilidad de sufrir una enfermedad cardiovascular y, además, hay un 3% de incremento de todas las causas de muerte, tal y como indica un estudio de Northwestern Medicine y la Cornell University de Chicago publicado en la revista `JAMA Internal Medicine´.

La principal autora del estudio, Norrina Allen, profesora asociada de Medicina Preventiva en la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad de Northwestern, explica que existe una pequeña diferencia entre consumir o no este tipo de alimento, pero que "vale la pena intentar reducir la carne roja y la carne procesada como el pepperoni, la mortadela y los embutidos", señala.

El estudio recopiló una muestra diversa de seis cohortes, incluyó datos de seguimiento de hasta tres décadas, datos de dieta armonizados para reducir la heterogeneidad, ajustó un conjunto integral de factores de confusión y realizó múltiples análisis de sensibilidad. Se basó en 29.682 participantes, con una media de edad de 53,7 años.

El cáncer, uno de los problemas

El World Cancer Research Fund (WCRF) explica que la carne roja y procesada puede llegar a causar cáncer, por lo que se aconseja que el consumo de esta sea en cantidades moderadas, con un límite de 500 gramos de peso cocido por semana.

En el caso de la carne procesada se aconseja que sea muy poca la cantidad ingerida. De este modo, los últimos estudios coinciden en la línea de la disminución de la carne en nuestras dietas, por lo que deberá ser sustituida por otro tipo de alimentos, como nueces, frutas, verduras y legumbres, entre otros.

¿Qué podemos comer para sustituir la carne roja?

La coautora del estudio citado, Linda Van Horn, profesora de Medicina Preventiva en Fienberg y miembro del Comité Asesor de Pautas Dietéticas de Estados Unidos para 2020, explica que los alimentos como el "pescado, los mariscos y las fuentes de proteínas de origen vegetal, como las nueces y las legumbres, incluidos los frijoles y los guisantes, son alternativas excelentes a la carne y se consumen muy poco (en los Estados Unidos)", detalla la experta.

Otros alimentos para suplir a la carne roja o reducir su consumo son; el tofu, la quinoa, el trigo sarraceno, el pescado azul, cualquier fruto seco, la mozzarella, los chapulines –equivalen a casi el doble de la proteína que obtenemos con la carne--, el amaranto o los huevos.

Las legumbres, uno de los alimentos más olvidados

Las legumbres son uno de los alimentos más olvidados de los últimos tiempos. Por segundo año consecutivo, este lunes, se celebra el Día Mundial de las Legumbres, para concienciar a las personas sobre los beneficios nutricionales del consumo de este superalimento. Se trata de uno de los productos cada vez menos demandado, de hecho, ha descendido su consumo en España más del 70 % desde los años setenta. Pese a sus buenas características nutricionales, ha pasado a estar en nuestras comidas tan solo una vez por semana, aunque las raciones recomendadas son tres, tal y como afirma `nutritienda.com´.